Voces de Puerto Rico: Reflexiones Dos Meses Después de María (Video)

Published: Jan 9, 2018

En este video, los residentes de Puerto Rico hablan sobre su vida cotidiana y puntos de vista de los esfuerzos de recuperación dos meses después del huracán María. Describen un clima de frustración, la pérdida de empleo y problemas económicas, la falta de servicios básicos como la electricidad y el efecto en la salud mental y física de la población. Un informe relacionado también está disponible.

Vivir en una Familia de Inmigrantes en los Estados Unidos: Cómo el Miedo y el Estrés Tóxico Están Afectando la Vida Diaria, el Bienestar y la Salud

Authors: Samantha Artiga and Petry Ubri
Published: Jan 9, 2018

Resumen

La política de inmigración ha sido y sigue siendo un tema controversial en los Estados Unidos. Durante el transcurso de las elecciones y desde que asumió el cargo, el presidente Donald Trump intensificó el debate nacional sobre inmigración ya que implementó reglas para reforzar la aplicación de las leyes migratorias y restringir la entrada de inmigrantes de países que, la Administración cree, pueden representar una amenaza para el país. El clima en torno a estas políticas y este debate puede afectar a 23 millones de personas en el país que no son ciudadanas, incluidos inmigrantes legales e indocumentados, muchos de los cuales llegaron a los Estados Unidos en busca de seguridad y mejores oportunidades para sus familias1 . También tienen implicaciones para los más de 12 millones de niños que viven con un padre no ciudadano, que son niños ciudadanos nacidos en los Estados Unidos2 . Realizamos grupos focales con 100 padres de 15 países y 13 entrevistas con pediatras para obtener una idea de cómo el ambiente actual está afectando la vida diaria, el bienestar y la salud de las familias inmigrantes, incluidos sus hijos. Los hallazgos clave incluyen:

Las familias inmigrantes, incluidas las que tienen un estatus legal, están experimentando niveles altos de temor e incertidumbre. Los temores afectaron a los participantes de todos los orígenes y lugares, con efectos particularmente pronunciados para los latinos y los musulmanes. Los padres indocumentados temen ser deportados y separados de sus hijos, mientras que muchos con estatus legal no están seguros de su estatus y temen perderlo o perder su permiso para permanecer en los Estados Unidos. Estos sentimientos de incertidumbre se intensificaron luego de la revocación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) en septiembre de 2017. Los padres dijeron que, aunque tratan de proteger a sus hijos de estos problemas, muchos niños escuchan sobre ellos en la escuela y temen perder potencialmente a sus padres a causa de una deportación o tener que abandonar los Estados Unidos, para muchos de ellos el único hogar que conocen.

“…nos levantamos todas las mañanas con miedo a ser deportados, a la separación de nuestras familias, a tener que dejar a los niños.” – Padre latino, Boston, Massachusetts

“Incómodo e inestable; creemos que en cualquier momento se podría emitir una nueva norma que lleve a expulsarnos y enviarnos de vuelta.” – Padre que habla árabe, Anaheim, California

Los padres y pediatras dijeron que el racismo y la discriminación, incluida la intimidación a niños, han aumentado significativamente desde las elecciones. Muchos sintieron que los latinos y los musulmanes han sido los principales blancos del aumento del racismo y la discriminación. También señalaron que el aumento de la intimidación a los niños en las escuelas se extiende más allá de los inmigrantes, a los niños de color, independientemente de su estatus migratorio.

“Los intimidan… les dicen cosas como ‘ahora tú y tu familia tendrán que irse’. Y así, a pesar de que esos niños en realidad no tienen que preocuparse por su estatus migratorio, creo que obviamente un niño, no conocen los detalles de cómo funciona el sistema.” – Pediatra, Pennsylvania

La vida cotidiana se ha vuelto más difícil para las familias inmigrantes debido al aumento del miedo y la incertidumbre. Algunos padres dijeron que es más difícil encontrar empleo en el entorno actual, lo que aumenta aún más las dificultades financieras para las familias. El aumento de los temores también está afectando las rutinas diarias de algunas familias. Algunos padres, particularmente aquellos que son indocumentados o que tienen un miembro de la familia indocumentado, dijeron que solo salían de la casa cuando era necesario, por ejemplo, para ir a trabajar; que conducen menos; y dejan de participar en actividades recreativas, como visitar un parque local. Como resultado, ellos y sus hijos pasan largas horas en la casa, a puertas cerradas. Los padres también indicaron que ellos, y sus hijos, temen cada vez más interactuar con la policía o autoridades.

“Antes, había muchos niños en los parques … pero ahora … Los niños pasan más tiempo dentro en estos días porque tenemos miedo de ser deportados.” – Padre latino, Boston, Massachusetts

“Mi cónyuge no sale de la casa… lo último que quiere es que la detengan y que empiecen a hacerle preguntas …” – Padre latino, San Diego, California

La mayoría de los padres dijeron que continúan buscando atención médica para sus hijos y manteniendo la cobertura de Medicaid y CHIP de sus hijos, pero hubo algunos informes de cambios en el uso de la atención médica y una menor participación en estos programas. Los padres destacan que priorizan mucho la salud de sus hijos y generalmente ven los hospitales y los consultorios como espacios seguros. Sin embargo, hubo algunos informes de cambios en el uso de la atención médica, incluido el uso reducido de algunos cuidados, y una menor participación en Medicaid y CHIP y otros programas debido al aumento de los temores.

“El caso es… si estás en el hospital estás a salvo. No pueden ingresar a un hospital, una escuela o una iglesia… porque es un santuario.” – Padre latino, Chicago, Illinois

El aumento de los miedos está teniendo efectos negativos significativos en la salud y el bienestar de los niños, que tienen consecuencias de por vida. Los padres y los pediatras informaron que los niños manifiestan temores de muchas maneras. Describieron cambios de comportamiento, como problemas para dormir y comer; síntomas psicosomáticos, como dolores de cabeza y estómago; y problemas de salud mental, como depresión y ansiedad. Los padres y los pediatras también sintieron que los temores están afectando negativamente el comportamiento y el rendimiento de los niños en la escuela. Los pediatras coincidieron en sentir una gran preocupación por las consecuencias a largo plazo del entorno actual para la salud de los niños. Señalaron una investigación de larga data sobre los efectos dañinos del estrés tóxico en la salud física y mental a lo largo de la vida. También expresaron su preocupación por los efectos negativos en el crecimiento y desarrollo de los niños, y sintieron que el ambiente actual está agravando los desafíos sociales y ambientales que tienen impactos negativos en la salud.

“Cuando te preocupas todos los días por que se lleven a tus padres o que tu familia se divida, que realmente es una forma de estrés tóxico… sabemos que tendrá implicaciones a largo plazo para la enfermedad cardíaca, para los resultados de salud para estos niños en la edad adulta.”  – Pediatra, Minnesota

En conjunto, estos hallazgos muestran que las familias inmigrantes en diferentes entornos y ubicaciones están sintiendo un aumento en los niveles de miedo e incertidumbre en medio del clima actual, y que estos sentimientos se extienden a aquellos con estatus legal. Los hallazgos muestran que estos temores están teniendo amplios efectos en la vida cotidiana y las rutinas de algunas familias inmigrantes. Además, señalan las consecuencias a largo plazo para los niños en familias inmigrantes, incluidos peores resultados de salud a lo largo de la vida, crecimiento y el desarrollo comprometidos, y aumento de los desafíos en los factores sociales y ambientales que influyen en la salud.

Informe

Introducción

La política de inmigración ha sido y continúa siendo un tema controversial en los Estados Unidos. Durante el transcurso de las elecciones y desde que asumió el cargo, el presidente Donald Trump ha intensificado el debate nacional sobre inmigración ya que ha implementado reglas para reforzar la aplicación de las leyes migratorias y restringir la entrada de inmigrantes de ciertos países que, la administración cree, pueden significar una amenaza para el país. (Apéndice 1). El clima alrededor de estas políticas y este debate afectan potencialmente a 23 millones de personas que viven en el país y no son ciudadanas, incluyendo a ambas: aquéllas con presencia legal y a los inmigrantes indocumentados, muchos de los cuales vinieron a los Estados Unidos en busca de seguridad y para mejorar las oportunidades para sus familias3 . También tienen implicaciones para los más de 12 millones de niños que viven con un padre que no es ciudadano, los cuales predominantemente son ciudadanos estadounidenses4 . Este informe provee una mirada sobre cómo el medio ambiente actual está afectando la vida diaria, el bienestar y la salud de las familias inmigrantes, incluyendo a sus niños. Los hallazgos se basan en grupos de discusión realizados con 100 padres de familias inmigrantes de 15 países, y entrevistas telefónicas con 13 pediatras que atienden a comunidades de inmigrantes.

Métodos

Durante el otoño de 2017, la Kaiser Family Foundation trabajó con PerryUndem Research/Communication para realizar grupos de discusión con 100 padres de familias inmigrantes. Los participantes en los grupos de discusión se seleccionaron para representar un rango de razas/etnias, países de origen, y estatus migratorio, y para proveer experiencias con diversidad geográfica. Se realizaron un total de 10 grupos de discusión en 8 ciudades de cuatro estados (Chicago, Illinois; Boston, Massachusetts; Bethesda, Maryland; y Anaheim, Fresno, Los Angeles, Oakland, and San Diego, California). Además, se realizaron 13 entrevistas telefónicas con pediatras y clínicas que atienden a familias de inmigrantes. Con la asistencia de la American Academy of Pediatrics, se identificaron pediatras que atienden a diferentes poblaciones inmigrantes en un amplio rango de estados (Arkansas, California, Illinois, Minnesota, North Carolina, Pennsylvania, Texas, Vermont) y el Distrito de Columbia. La Blue Shield of California Foundation apoyó los grupos de discusión y las entrevistas realizadas en California.

Los grupos de discusión se realizaron en 5 idiomas con padres provenientes de 15 países. Hubo seis grupos de discusión de hispanohablantes con padres de México, el Caribe, Centroamérica y Sudamérica, un grupo con padres coreanos; un grupo con padres que hablan portugués de Brasil y Cabo Verde; un grupo con padres que hablan farsi de Afganistán; y otro grupo de padres que habla árabe de Irak, Egipto y Siria. Los participantes incluyeron a personas con un rango de estatus migratorio: indocumentados, refugiados/con asilo; y residentes permanentes legales (que tienen una green card). (Ver Apéndice 2 para tener una mirada general sobre los estatus migratorios seleccionados). Cuatro de los grupos se organizaron en instalaciones para grupos de discusión, los seis restantes en organizaciones comunitarias. Dado que los participantes en los grupos organizados por las entidades comunitarias a menudo recibían servicios a través de la organización, generalmente estaban conectados a más recursos y tenían más conocimientos sobre sus derechos en comparación con la comunidad en general.

Se realizaron entrevistas telefónicas uno-a-uno con pediatras. Los pediatras entrevistados atienden a una variedad de familias inmigrantes, incluyendo a inmigrantes latinos de México, Centroamérica y Sudamérica, así como a inmigrantes de otra serie de países y regiones, incluyendo Bután, Burma, China, India, Corea, Myanmar, Mongolia, Vietnam, Yemen, la República Democrática del Congo, Somalia, Etiopía, Eritrea, Europa del Este y el Medio Oriente.

Hallazgos Clave

Panorama de los padres participantes y de sus familias

Los padres participantes migraron a los Estados Unidos para escapar de la guerra o de la actividad de las pandillas en sus países de origen, por oportunidades de trabajo y educación, y/o para reunirse con familiares. Algunos padres contaron historias sobre la pérdida de seres queridos en guerras o por la violencia de pandillas en sus países de origen, y dijeron que migraron a los Estados Unidos en busca de seguridad. De la misma manera, refugiados y personas con asilo migraron para escapar de la guerra o la persecución en sus países de origen. Muchos padres también destacaron que sus países de origen tienen altas tasas de pobreza, sistemas de educación inadecuados, y pobres perspectivas de trabajo, y que venir a los Estados Unidos provee a sus familias mejores oportunidades laborales y de educación. Algunos participantes también vinieron a los Estados Unidos para unirse a otros miembros de la familia que habían migrado previamente. Los participantes variaron ampliamente en cuanto al tiempo que llevan viviendo en los Estados Unidos. Algunos estaban en el país desde hacía muchos años, mientras que otros habían llegado más recientemente. Algunos llegaron a los Estados Unidos de niños y no tienen experiencias en sus países de origen. Un número de participantes, particularmente refugiados y personas con asilo que escaparon de la guerra, expresaron cuán agradecidos estaban por la oportunidad de estar en los Estados Unidos.

“Mataron a tres miembros de mi familia y… me fui.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“Soy salvadoreño y, por la guerra, vine aquí. Asesinaron a mi hermano y entonces vine aquí.” -Padre latino, Boston, Massachusetts

“En México no hay oportunidades, incluso para la gente joven. El medio ambiente es demasiado violento.” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Muchos de nosotros vinimos de niños, y no teníamos idea sobre el futuro. Ahora no tenemos otra opción más que quedarnos porque… tenemos miedo de volver a un lugar con el que no estamos familiarizados.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Estoy aquí desde que tenía 6 años, tengo una hija que tiene 6. No estoy familiarizada con ningún otro país. Amo a este país.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“…nuestro padre nos trajo aquí para de esa manera tener mejor educación.” –Padre latino, Fresno, California

“El gobierno de los Estados Unidos nos recibió porque no nos estábamos sintiéndonos seguros en nuestros países y porque éramos discriminados. Agradecemos a los Estados Unidos por eso.” –Padre que habla árabe, Anaheim, California

“Una de las principales razones es la seguridad, en términos de seguridad física, mental, emocional …” –Padre afgano, Oakland, California

“…allí [en México], hay mucho crimen.” –Padre latino, Fresno, California

Los niños de los padres que participaron son mayormente ciudadanos nacidos en los Estados Unidos. De manera similar, los pediatras destacaron que en muchas de las familias que atienden, los niños nacieron en los Estados Unidos mientras que uno o ambos padres pueden ser indocumentados. Algunos padres también tienen hijos mayores que trajeron con ellos a los Estados Unidos, los cuales obtuvieron un estatus bajo el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) o son indocumentados. Unos pocos todavía tienen niños en sus países de origen. Los padres destacaron que sus niños nunca han visitado sus países de origen y que los Estados Unidos es el único hogar que conocen. Los hijos de refugiados y personas con asilo incluyen una mezcla de aquellos que volaron a los Estados Unidos con sus padres, y niños más pequeños que nacieron en los Estados Unidos.

Las barreras económicas y del lenguaje son una gran preocupación para muchos participantes. Los participantes generalmente tienen al menos un trabajador en la familia, a menudo en servicios, construcción, o trabajos de jardinería. Muchos indicaron que están tratando de encontrar la mayor cantidad de trabajo posible, pero todavía viven quincena a quincena. Destacaron que los costos de la renta y las compras continúan aumentando, haciendo difícil llegar a fin de mes. Los participantes que llegaron a los Estados Unidos más recientemente, en particular aquéllos de países de Medio Oriente, describieron desafíos asimilando la vida en los Estados Unidos, destacando la presión por encontrar trabajo rápidamente y la dificultad que enfrentan debido a las barreras culturales y del idioma. Algunos señalaron que tenían carreras profesionales en sus países de origen, y que han tenido que trabajar en empleos menos calificados cuando se establecieron.

Miedos y preocupaciones entre las familias

Padres y pediatras dijeron que el miedo a la deportación y los sentimientos generales de incertidumbre han aumentado desde la elección presidencial. Los padres que son indocumentados, o que tienen un miembro de la familia que lo es, expresaron miedos crecientes a ser separados de sus hijos y/o cónyuge. Algunos también temen volver a sus países de origen por la violencia o la actividad de las pandillas. Un número de participantes tienen amigos y/o familiares que fueron detenidos o deportados recientemente. También describieron redadas recientes y actividad de oficiales de inmigración en sus vecindarios, en las calles y en sus lugares de trabajo. Un pediatra destacó que, aunque se percibe que estos miedos entre los inmigrantes indocumentados afectan principalmente a latinos, hay un número creciente de indocumentados asiáticos que también están sintiendo más miedo.

“El área en donde vivo… la mayoría de las redadas ocurren allí. Y escuchamos muchos casos sobre personas que deportan de sus apartamentos en esa área… la comunidad está tan asustada.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Si mi esposo es deportado, ¿cómo se supone que viviré aquí sin él? No hay manera. Quiebra a toda la familia.” –Padre que habla portugués, Boston, Massachusetts

“…nos levantamos todas las mañanas con miedo a ser deportados, a la separación de nuestras familias, a tener que dejar a los niños.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“…soy ambos, mamá y papá para mis hijos… por eso, debo estar ahí, y pienso, Dios perdóname, pero si me detienen, me deportarán …” –Padre latino, Chicago, Illinois

“…todos están temerosos porque tienen sus vidas aquí. No tienen papeles, pero tienen sus vidas aquí y ya no tienen nada en México porque, quiero decir, está años atrás. No hay forma que se mantengan allí.” –Padre latino, Fresno, California

“Me pasó varias veces que escuchas que alguien golpea a tu puerta y se lleva a tus familiares y los encierra.” –Padre latino, Fresno, California

“Están poniendo más presión en la frontera. Revisan todo.” –Padre latino, San Diego, California

“Creo que todo asusta más. Hay más miedo en mi personalmente hablando… ahora siento que es personal. No antes, pero ahora lo siento.” –Padre latino, Los Angeles, California

“Los peores miedos son que nos separen… que vayan a separar familias.” –Padre latino, Los Angeles, California

Los sentimientos de mayor miedo e incertidumbre se extienden a aquéllos con estatus legal. Por ejemplo, padres coreanos en Chicago y afganos en Oakland dijeron que sentían que tener una green card ya no era suficiente y que necesitan obtener la ciudadanía para asegurar su estatus. Algunos dijeron que, incluso con una green card, ya no se sentían seguros viajando fuera del país, porque les preocupa que puedan tener problemas al regresar a los Estados Unidos. Algunos padres también dijeron que, desde la elección, se ha vuelto más difícil obtener la ciudadanía, y que el período de tiempo para obtener una green card o la ciudadanía ha aumentado. Los padres que hablan árabe y un número de pediatras informaron que los refugiados y personas con asilo se sienten inseguros y preocupados sobre si podrán permanecer en el país. Los pediatras enfatizaron que los refugiados y personas con asilo llegan con historias de persecución del gobierno y que es difícil para ellos confiar en que permanecerán protegidos. Además, algunos padres expresaron preocupación que el gobierno pueda eliminar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para las personas de Nicaragua, El Salvador y Honduras5 . Algunos padres dijeron que, aunque las políticas actuales no los han afectado, les preocupa que las reglas cambien, causando que pierdan el estatus o el permiso para permanecer en los Estados Unidos.

“Me siento inquieto. Aunque ya tenemos la green card, si no solicitamos la ciudadanía, no creo que podamos estar tranquilos.” –Padre coreano, Chicago, Illinois

“Antes de esto, estábamos viviendo aquí con residencia permanente sin ciudadanía y pensábamos que no sería un problema… pero después que Trump fue electo, pensé, si quiero vivir aquí y criar a mi hijo, tendré que solicitar la ciudadanía.” –Padre coreano, Chicago, Illinois

“Incómodo e inestable; creemos que en cualquier momento se podría emitir una nueva norma que lleve a expulsarnos y enviarnos de vuelta.” –Padre que habla árabe, Anaheim, California

“No hay estabilidad. [El presidente] podría escribir un tweet en Twitter mañana y poner las cosas patas para arriba.” –Padre que habla árabe, Anaheim, California

“…Las nuevas leyes están siendo aprobadas, nos mantienen con una sensación de incertidumbre… TPS… DACA, ¿qué va a pasar en seis meses?” – Padre latino, Bethesda, Maryland

“La preocupación es que hoy es un grupo, y mañana puede ser otro. Hoy podemos estar contentos de que nos hayan dejado solos, pero mañana podría ser otra historia.” – Padre afgano, Oakland, California

“Cuando se eligió al presidente Trump, había un enorme, enorme temor en nuestras comunidades de refugiados y nuestras comunidades de inmigrantes. No importaba que tuvieran estatus legal…” –Pediatria, Vermont

“Incluso si ellos mismos no están directamente en riesgo porque estarían en una situación migratoria que los beneficia, especialmente en el caso de los refugiados, están tan acostumbrados a temer al gobierno y desconfían del gobierno…” –Pediatria, California

Padres y pediatras destacaron una particular preocupación entre los jóvenes que obtuvieron DACA. En los grupos de discusión que se realizaron antes de la revocación de DACA, los padres expresaron preocupaciones sobre la seguridad de DACA, temiendo que el programa fuera eliminado. En los grupos realizados después de la revocación de DACA, padres reportaron que el miedo y la incertidumbre entre los recipientes de DACA se había intensificado, con muchos preocupados por su situación actual y perdiendo esperanza en el futuro.

“Los niños que están en la escuela también están preocupados, los que van a la universidad, porque no sabemos qué pasará con DACA …”—Padre latino, Boston, Massachusetts

“Hablo en el caso de DACA. Todos están en el camino correcto. Todos están estudiando, pero aún enfrentan riesgos. Entonces, puede sucedernos a cualquiera de nosotros… Todo depende de [el presidente] y de las leyes que crean.” –Padre que habla portugués, Boston, Massachusetts

“Está yendo para atrás, porque todo lo que Obama ayudó a los dreamers, bueno, ahora todos sienten miedo porque Trump quiere quitar eso …” –Padre latino, San Diego, California

“…ella pudo obtener DACA … si no puede renovarlo, está pensando que irán a buscarla porque tienen toda su información.” –Padre latino, Los Angeles, California

“…Tengo dos primos y estaban bajo la Ley DREAM … todos tienen trabajos e iban a la escuela y… conocen toda su vida aquí. Y todo, para que simplemente se los lleven.” –Padre latino, Fresno, California

“Conozco a alguien con DACA que lo obtuvo recientemente y… desde que obtuvo su permiso de trabajo se le abrieron muchas puertas… entonces sus sueños fueron enormes, pero ahora, frenando DACA, tiene tanto miedo.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“[Yo estaba] en el proceso [de solicitud de DACA] cuando escuchamos las noticias. Fue realmente doloroso… estaba haciendo las cosas bien, por mi cuenta… para buscar un futuro para mí y para mis hijos. Entonces entra la depresión, ¿qué voy a hacer ahora?” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Recientemente también tengo un par de pacientes … más de un par… con quienes he hablado, que son recipientes de DACA que se sienten muy inseguros sobre cuál será su futuro.” -Pediatria, District of Columbia

Los padres variaron en los niveles de miedo que sentían. Una variedad de factores influyó en el nivel de miedo que sentían los padres, incluyendo sus estatus migratorios y el de los miembros de la familia; experiencias en sus países de origen, razones por las que migraron a los Estados Unidos, el período de tiempo en el país; la extensión de la diversidad, apoyo y liderazgo en sus comunidades locales; y la exposición a las deportaciones y las redadas. Por ejemplo, algunos participantes en California que eran de México destacaron una disposición a restablecer sus vidas en México si ellos o un familiar era deportado, particularmente aquéllos en San Diego que están cerca de la frontera. Por el contrario, participantes de otros países que llegaron a los Estados Unidos para escapar de la guerra y/o la persecución dijeron que volver a sus países de origen no era una opción. Los padres que han vivido en los Estados Unidos por muchos años generalmente se sentían más seguros que aquellos que habían llegado más recientemente. Los padres conectados con las organizaciones comunitarias locales sintieron que estaban más informados sobre sus derechos en comparación con otros en la comunidad, y que los rumores difundidos a través de las redes sociales o el “boca a boca” a menudo conducen a un aumento de los miedos y el pánico basados en la información errónea. Un pediatra señaló que, entre las comunidades asiáticas, existe una renuencia a hablar sobre el estatus migratorio, lo que limita el intercambio de información y puede contribuir a aumentar los temores derivados de rumores o desinformación.

“…las comunidades latinas aquí en el valle, específicamente aquí en Fresno, tal vez no se sienten apoyadas porque nuestros líderes, nuestros líderes comunitarios, no han alcanzado el nivel para poder ofrecer el apoyo a todos.” – Padre latino, Fresno, California

“Ese es el problema con muchas personas, no se informan, no buscan la información real. Solo se basan en lo que escucharon en las noticias o en lo que les dijo su amigo.” – Padre latino, Chicago, Illinois

Los niños también sienten un aumento del miedo y la incertidumbre sobre la posibilidad de perder a sus padres a causa de una deportación, o tener que regresar a los países de origen de sus padres. Padres a través de los grupos, incluyendo aquéllos con estatus legal, recordaron historias de sus niños, y niños en sus comunidades, llegando a casa llorando inmediatamente después de la elección presidencial, preocupados sobre qué pasaría con ellos y si tendrían que irse del país. Los padres dijeron que, aunque tratan de proteger a sus hijos de estos temas, muchos los están escuchando en la escuela. También dijeron que algunos niños han expresado temores e inquietudes sobre los países de origen de sus padres, señalando que los Estados Unidos es el único hogar que conocen.

“…después que Trump fue elegido, los niños lloraron en la escuela y dijeron que tenían que emigrar a Canadá. Los niños hablan mucho entre ellos.” –Padre coreano, Chicago, Illinois

“Después de la inauguración, mis hijos más pequeños lloraban porque pensaban que iban a ser deportados …” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Mis hijos llegaban a casa de la escuela y contaban que en la escuela decían que todos los padres serían deportados…” –Padre que habla portugués, Chicago, Illinois

“Todos los niños, incluso si nacieron aquí, tienen miedo. Temen que cada vez que regresan de la escuela no encontrarán a sus padres.” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Y entonces ella se puso triste. Y hasta lloró solo viendo las noticias y viendo cómo inmigración está haciendo redadas y cómo recogen gente.” –Padre latino, Fresno, California

“….ella se preocupa demasiado, más de lo que los niños deberían preocuparse. Quiero decir que es solo una niña pequeña. Realmente no puedes decirle que no se preocupe.” –Padre latino, Fresno, California

“[Mi hijo] de 15 años… pregunta, ‘¿cómo voy a regresar a Brasil si tengo que empezar todo de nuevo? …’ Dice… ‘si regreso, tengo que empezar de nuevo y perder mucho tiempo, y no sé si me adaptaré allí otra vez’.’” –Padre que habla portugués, Boston, Massachusetts

“Bueno, mis hijos se asustaron por mí. Ya sabes, cuando Donald Trump ganó, el más joven me abrazó y me dijo ‘mamá, no tienes ninguno de tus papeles’”. –Padre latino, Los Angeles, California

“Creo que hay temor e incertidumbre general que incluso los niños que pertenecen a familias que no tienen estatus de ciudadanía mixto, pero… son niños de color o niños que son latinos o niños cuya familia prefiere hablar español…” –Pediatria, North Carolina

“Honestamente, no solo son las familias indocumentadas… sino también las familias donde los niños son residentes legales permanentes o tienen estatus de refugiados. Me refiero incluso a esas familias: los padres vinieron y me dijeron que sus hijos estaban preocupados.” –Pediatria, Pennsylvania

“…ahora sentir estos temores cada vez mayores acerca de si van a ver a sus padres o no al final del día, ¿van a poder terminar la escuela, van a tener que mudarse…? Hay una gran cantidad de ansiedad.” –Pediatria, California

Los participantes y pediatras dijeron que el racismo y la discriminación, incluyendo el acoso de niños de color en las escuelas, ha aumentado significativamente desde la elección. Un número de padres dijo que las experiencias personales con el racismo y la discriminación han aumentado desde la elección y describieron incidentes recientes contra ellos mismos, amigos y/o familiares. Muchos sentían que los latinos, particularmente los mexicanos, y los musulmanes han sido los principales blancos del racismo y la discriminación crecientes. También señalaron que la intimidación a los niños ha aumentado en las escuelas y que se extiende más allá de los inmigrantes a los niños de color, independientemente de su estatus migratorio.

“Siempre ha habido racismo, pero en este momento ha salido a la superficie.” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Cuando viajo a lugares como el oeste o un lugar sin coreanos o étnicamente homogéneo, cuando es predominantemente blanco, tengo un poco de miedo.” –Padre coreano, Chicago, Illinois

“Hay algunas personas racistas que comenzaron a sentirse más cómodas desde que Trump fue elegido, y ahora expresan su odio hacia los inmigrantes más libremente.” –Padre que habla árabe, Anaheim, California

“…Donde trabajo, personalmente veo que la gente me discrimina… y tengo que intervenir por mis empleados. No tuve que hacerlo antes, pero ahora es como un renacimiento de la discriminación.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Trabajo en jardinería, y estamos trabajando y te ven trabajando… y empiezan a gritarte cosas…” –Padre latino, Fresno, California

“…el caso es que este presidente, desde que hizo algunos comentarios que son muy racistas, ahora las personas que son de aquí en Fresno y donde sea que vayan… ahora también van en contra de nosotros.”  –Padre latino, Fresno, California

“…Creo que antes de Trump no había tanta discriminación como ahora.” – Padre latino, San Diego, California

“….mi cuñada estaba en el trabajo y le prohibieron hablar español.” – Padre latino, San Diego, California

“Después de la inauguración, mi hija… no podría estar bien en la escuela porque hay mucho racismo.” – Padre latino, Chicago, Illinois

“He tenido pacientes y padres que voluntariamente me dicen que sus hijos se enfrentan a más intimidación.” –Pediatria, Minnesota

“Los intimidan… les dicen cosas como ‘ahora tú y tu familia tendrán que irse’. Y así, a pesar de que esos niños en realidad no tienen que preocuparse por su estatus migratorio, creo que obviamente un niño, no conocen los detalles de cómo funciona el sistema.” –Pediatria, Pennsylvania

“…el miedo a ser uno mismo, ¿está bien ser musulmán, usar una hijab?, a muchos de los niños se los intimida por la forma en que se ven, la forma en que se visten, su identidad cultural, y por lo tanto hay mucha ansiedad.” –Pediatria, California

Efectos en la vida diaria

Algunas familias, particularmente aquéllas con un miembro indocumentado, están haciendo cambios en su vida diaria y rutinas en respuesta al miedo a la deportación. Algunos dijeron que solo salen de la casa cuando es necesario, por ejemplo, para trabajar; limitan el tiempo de manejo o solo conducen los que tienen un estatus legal; y/o limitan su tiempo fuera de sus vecindarios. Por ejemplo, padres en Boston dijeron que las familias solían colmar los parques los fines de semana con picnics y parrilladas, pero ahora estaban vacíos. Varios padres y pediatras indicaron que las familias ahora pasan largas horas dentro de sus hogares, bajo llave, temerosas cada vez que alguien toca a la puerta. Algunos padres y pediatras también notaron que la asistencia escolar disminuyó inmediatamente después de las elecciones y que se desploma después de una redada de inmigración o si hay un rumor de un allanamiento en la comunidad. Los padres en Maryland y California dijeron que algunas de las escuelas enviaron cartas para tranquilizar a las familias sobre su seguridad en la escuela, que, creen, ayudó a aliviar los temores. Las familias también temen cada vez más a la policía y las autoridades, y algunos padres y pediatras expresaron su preocupación que las personas se animen menos a denunciar agresiones, abusos u otros delitos. Otros participantes, especialmente aquéllos que han vivido en los Estados Unidos por muchos años y que residen en diversas comunidades con un fuerte apoyo, dijeron que continúan con su vida cotidiana y sus rutinas regulares a pesar del aumento de los temores.

“Antes, había muchos niños en los parques … pero ahora … Los niños pasan más tiempo dentro en estos días porque tenemos miedo de ser deportados.” – Padre latino, Boston, Massachusetts

“Tememos miedo de abrir la puerta o mirar a través de la mirilla para ver quién es…” – Padre latino, Boston, Massachusetts

“También me preocupa porque si algo nos sucede en la calle, si nos agreden o algo así, ni siquiera podremos llamar a la policía porque verán que somos inmigrantes.” – Padre latino, Boston, Massachusetts

“…pero ahora alrededor de las 6 o 7 de la tarde no encontrarás a nadie en [el vecindario] … por el miedo que todos sentimos sobre lo que va a suceder.” – Padre latino, Chicago, Illinois

“Mi cónyuge no sale de la casa… lo último que quiere es que la detengan y que empiecen a hacerle preguntas …” – Padre latino, San Diego, California

“Hoy en día las personas evitan caminar por ciertos lugares.” – Padre que habla portugués, Boston, Massachusetts

“…la mayoría de ellos no fue a la escuela el primer día después que él ganó porque todos temían que sucediera algo.” – Padre latino, Boston Massachusetts

“En las escuelas, se levantan todas las mañanas con el temor de dejar a sus hijos, pensando que tal vez los detengan.” – Padre latino, Fresno, California

“Cuando conduzco, y [mi hijo] ve a un policía, empieza a ponerse realmente nervioso, está muy nervioso.” – Padre latino, Los Angeles, California

“Las escuelas nos han enviado notas diciendo que no deberíamos preocuparnos… y que no deberíamos temer enviar a los niños a la escuela.” – Padre latino, Los Angeles, California

“…cuando, en la comunidad latina, hay un mensaje a la comunidad que ICE está haciendo, está haciendo redadas, luego todos se detienen, dejan de enviar a sus hijos a la escuela y dejan de venir a la clínica.” –Pediatria, California

Muchos participantes dijeron que es más difícil encontrar empleo en el entorno actual, lo que agrava los problemas financieros. Un número consideró que las opciones de empleo se habían vuelto más limitadas desde las elecciones presidenciales. Señalaron que hay menos permisos de trabajo disponibles y que los permisos no se están renovando. Algunos también dijeron que el aumento de los procedimientos de verificación por parte de los empleadores está causando que algunas personas pierdan sus empleos, a veces trabajos que han tenido durante muchos años. Ante estos desafíos, los participantes dijeron que a menudo tienen que salir de sus barrios o comunidades y/o viajar grandes distancias para encontrar trabajo, lo que aumenta el tiempo y los costos de traslado y dificulta el cuidado infantil. En algunos casos, las personas ya no buscan trabajo porque temen exponerse a las autoridades. De manera similar, algunos padres en Maryland dijeron que temen ser voluntarios en las escuelas de sus hijos porque las escuelas requieren que los padres voluntarios presenten documentación y se sometan a una verificación de antecedentes.

“En este momento, en su mayoría, no están dando permisos; ellos quieren que nos vayamos. Entonces cuando no tenemos permiso de trabajo, nadie nos contrata.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“La situación laboral es cada vez más difícil … si saben que no tienes documentos … empiezan a cuestionar por qué trabajas allí …” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Es más difícil encontrar trabajo, y nos levantamos todos los días con el temor de ser deportados, de separarnos de nuestras familias, de tener que dejar a los niños.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“Me gustaría encontrar otro trabajo, y es difícil poder buscar trabajo porque no sientes el mismo tipo de confianza o seguridad que tuviste en años anteriores cuando simplemente ibas y dejabas tu información.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Muchas veces no trabajo… porque siento que estoy más segura aquí en mi casa. Y a veces lo que gana mi marido no es suficiente y por eso debes limitarte en muchas cosas.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Porque estaba trabajando en una empresa que era más o menos grande… y tuve que irme, porque me dijeron que iban a verificar nuestra documentación.” –Padre latino, Los Angeles, California

Algunos padres han organizado el cuidado de sus hijos en caso que los detengan o deporten, mientras que otros están inseguros y temerosos sobre lo que les pasaría a sus hijos. Algunos padres han preparado poderes notariados para autorizar a miembros de la familia o amigos a convertirse en guardianes de sus hijos en caso de detención o deportación. Algunos también informaron haber recibido solicitudes de vecinos, familiares y/o amigos para convertirse en guardianes de sus hijos. Sin embargo, otros padres dijeron que no saben quién cuidaría de sus hijos si fueran detenidos o deportados y/o que no tienen amigos o familiares aquí en los Estados Unidos a los que puedan pedir ayuda. Un pediatra señaló que algunos padres preguntaban si podían designar al hospital de niños como guardián para niños con necesidades complejas porque no tenían a nadie más que pudiera proporcionar el nivel de atención que necesitan sus hijos.

Efectos en la salud y el bienestar de los niños

El aumento del miedo entre los niños se manifiesta de muchas maneras, incluidos problemas de conducta, síntomas psicosomáticos y problemas de salud mental. Los padres y los pediatras informaron que los temores están contribuyendo a problemas de comportamiento entre los niños, incluidos problemas para dormir y comer, regresión, aumento de la inquietud y agitación, y alejamiento de familiares y amigos. Los niños también experimentan síntomas psicosomáticos, como dolores de cabeza, estómago, náuseas y vómitos. Además, los padres y pediatras indicaron que algunos niños experimentan ansiedad, tienen ataques de pánico, muestran síntomas de depresión y/o expresan una pérdida general de esperanza en el futuro. Por ejemplo, un pediatra contó cómo un niño cuyo padre había sido deportado comenzó a tener ataques de pánico porque temía perder también a su madre y que lo pusieran en cuidado temporal. Otro pediatra señaló que, después de las elecciones, el “miedo a Trump” surgió como una queja principal en su agenda diaria.

“…no expresan cómo se sienten, solo intentan mantenerse cerca de mamá, para que no se vaya. Si va a algún lado, entonces van con ella …” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“El mío tiene 6. No estoy seguro de si se da cuenta de lo que está pasando, pero se asusta cuando le digo que voy a viajar. Me dice que no vaya porque dice que no volveré, que no volverá a verme.” –Padre que habla portugués, Boston, Massachusetts

“…iría a la biblioteca, iríamos en el autobús, pero ella dijo, ‘si vamos a la biblioteca, la inmigración te llevará, no vayamos’. Y así me mostró que su miedo es tan grande que preferiría simplemente no ir a la biblioteca.” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Llegan con una queja física y luego llegamos al fondo, y el fondo es la ansiedad.” –Pediatria, California

“…Pero perder … ese apoyo, ese tipo de apoyo emocional y financiero ha sido realmente difícil. Esas son las familias que diría probablemente cuando se trata de problemas de salud mental, donde lo veo más intensamente, donde es … más dramático en términos del cambio, el cambio en el niño ya sea más retraído o actuando más extraño, o estando más ansioso…”                    –Pediatria, District of Columbia

“Ayudamos a muchos niños y padres con problemas para dormir. Tuvimos muchos niños que lloraban y tal vez tuvieron algunos comportamientos regresivos.” –Pediatria, Vermont

“Entonces puedes ver algunas regresiones en su desarrollo. Tal vez estaban entrenados para ir al baño antes y ahora no, tal vez ya no mojaban la cama por la noche y de repente la mojan, tal vez están más pegotes de lo que estaban…” –Pediatria, Texas

“…Así que los niños que podrían tener algún tipo de síntomas inespecíficos como dolor de estómago o dolores de cabeza. Y luego, cuando hablas con ellos, es porque están realmente preocupados por su familia y sus padres, y lo que les vaya a pasar.” –Pediatria, Pennsylvania

“Los niños que vienen con inquietudes en los que se puede rastrear ansiedad suelen ser los estudiantes de los grados superiores de la primaria, 3°, 4° grado, estudiantes de la escuela media… de 7° y 8° grado, que tienen quejas inespecíficas como dolor anormal o dolores de cabeza o disminución del apetito… Y luego, en niños que están en la secundaria para el rango de edad de la escuela secundaria, es un poco más amplio: tristeza, disminución del apetito, no querer participar en actividades habituales, disminución del rendimiento en la escuela, ese tipo de cosas.” –Pediatria, Arkansas

Los padres y pediatras expresaron su preocupación que el aumento del miedo y el estrés esté afectando negativamente el rendimiento escolar de algunos niños. Los padres y los pediatras dijeron que algunos niños tienen cada vez más dificultades para prestar atención en la escuela debido a su estrés y la preocupación de perder potencialmente a sus padres. Un par de pediatras notaron un aumento en los informes escolares de trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH), que, creen, pueden ser problemas de atención derivados del miedo o la ansiedad. Otros notaron que algunos niños están teniendo problemas de comportamiento que están interfiriendo con su desempeño en la escuela. Por ejemplo, uno de los padres notó que su hijo recientemente tuvo problemas en la escuela como resultado de enfrentarse a otros estudiantes que intimidaban a otros niños hispanohablantes.

“Sus calificaciones disminuyen, no van a la escuela con el mismo entusiasmo que antes. Van a la escuela con miedo a no encontrar a sus padres cuando vuelvan …” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“Comienzan a empeorar en la escuela o tienen problemas de conducta en la escuela.” –Pediatria, Texas

“…así que tiende a ser que los niños no están interesados ya sea en terminar las tareas o en hacer otro trabajo, porque están enfocados en lo siguiente que les sucederá a sus padres, que están pasando por un procedimiento.” –Pediatria, Arkansas

El aumento de los temores también ha afectado el bienestar de los padres y les ha dificultado concentrarse en el cuidado. Varios padres informaron que también están sufriendo un aumento de la ansiedad y/o depresión debido a sus miedos. Algunos informaron problemas para dormir y comer, así como dolores de cabeza y náuseas productos del estrés y la preocupación. Algunos pediatras indicaron que, en algunos casos, estos temores han servido como desencadenantes para los padres que tienen antecedentes de trauma o persecución, que conducen a la depresión y/o ansiedad. Los pediatras también notaron que, a medida que los padres experimentan un aumento en el estrés y la ansiedad, pueden tener más dificultades para concentrarse en el cuidado y/o alejarse más de sus hijos. Algunos pediatras informaron preocupaciones sobre las tensiones en las relaciones familiares, particularmente cuando los miembros de la familia tienen diferentes estatus migratorios. Por ejemplo, un hermano menor en la familia puede ser un ciudadano nacido en los Estados Unidos, mientras que un hermano mayor puede ser indocumentado o ser recipiente de DACA.

“Tuve muchas pesadillas. A menudo soñaba que la inmigración vendría y lloraba mucho. Me despertaba temblando…” –Padre latino, Chicago, Illinois

“Y me deprimí, no tenía hambre, no podía dormir, temía salir”. Yo lloraba a veces. No tuve hambre durante varios días, era como si estuviera deprimido.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“Dolores de cabeza de pensar tanto porque solo piensas en lo que va a pasar”. Piensas en el futuro; ¿Qué pasa si esto sucede, qué voy a hacer??” –Padre latino, Bethesda, Maryland

“Creo que la ansiedad paralizaría a la gente y no podrían ser padres. No podrían funcionar, algunas personas, porque estaban tan abrumados y ansiosos; no podía ir a trabajar, no podía salir de su casa …” –Pediatria, Vermont

Efectos en el uso de la atención de salud

La mayoría de los padres indicaron que no han realizado ningún cambio en la forma en que buscan la atención médica para sus hijos en respuesta a un aumento de los temores; sin embargo, algunos padres y pediatras describieron cambios en el uso de la atención médica. La mayoría de los padres señalaron que continúan buscando atención médica para sus hijos y que confían en sus médicos actuales, y consideran que los consultorios y hospitales son espacios seguros. También notaron que priorizan la búsqueda de atención médica para sus hijos por sobre sus miedos. Los pediatras también informaron que, en general, los pacientes siguen recibiendo atención. Sin embargo, algunos padres y pediatras reportaron disminuciones en las visitas y/o cambios en el horario de las visitas. Por ejemplo, algunos pediatras han observado una baja en las citas de niños sanos, en los seguimientos de derivaciones con proveedores con los que las familias no tienen una relación existente y en las mujeres embarazadas que buscan atención prenatal. Un pediatra también informó que algunos padres ya no abren sus puertas o no atienden llamados para consultas de salud en el hogar. Otro pediatra consideró que los padres habían cambiado de utilizar las visitas programadas a las visitas sin cita porque pueden dudar en proporcionar información para programar la cita. En Boston, algunos padres dijeron que tratan de programar las citas de sus hijos por la mañana porque sienten que ese es el momento más seguro para estar afuera. Además, un pediatra informó que los padres están agrupando visitas para minimizar la frecuencia de visitas y limitar su tiempo fuera del hogar. En Fresno, algunos padres dijeron que, en el entorno actual, prefieren utilizar proveedores latinos.

“El caso es… si estás en el hospital estás a salvo. No pueden ingresar a un hospital, una escuela o una iglesia… porque es un santuario.” –Padre latino, Chicago, Illinois

“…tienes que elegir un médico… que sea más hispano… como están las cosas ahora con la inmigración …” –Padre latino, Fresno, California

“Ahora intento hacer mis citas más temprano en la mañana para no quedarme demasiado tiempo afuera. Por lo tanto, trato de hacer esto temprano y luego me quedo tranquilo en casa.” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“…Hemos tenido familias… en particular, aquellas familias de grandes necesidades; diciendo cosas … como ‘bueno, tengo estas tres citas con especialistas que tenemos que hacer. Vamos a hacerlos el mismo día’, … porque les preocupa estar… en público con frecuencia y con el riesgo de ser detenidos.” –Pediatria, District of Columbia

“Creo que lo más sorprendente es que nuestros trabajadores de salud en el hogar se daban cuenta que cuando llamaban a las puertas, las personas no respondían …” –Pediatria, Minnesota

“…También hemos visto familias haciendo cambios significativos en el acceso a la atención debido a las preocupaciones sobre el estatus migratorio. Entonces, las familias cuyos hijos necesitan ver a especialistas que retrasaban esas citas especiales porque no se sentían cómodos saliendo de su casa o de su barrio donde se sentían seguros.” –Pediatria, Pennsylvania

Los pediatras describieron algunas acciones que están tomando para ayudar a las familias a sentirse seguras. Los pediatras informaron que colocaron letreros en sus consultorios para comunicarles a las familias que sus hijos son bienvenidos y que están seguros. Uno observó que han puesto al personal bilingüe fuera de la entrada para recibir a las familias y asegurarse de que no encuentren ninguna dificultad al ingresar a la clínica. Algunos indicaron que están tomando medidas para asegurar a las familias que mantendrán la confidencialidad de su información, de modo que se sientan cómodas hablando de cuestiones relacionadas con la inmigración durante las visitas de atención médica. Un número dijo que han capacitado al personal para destacar la importancia de la confidencialidad y las mejores prácticas para discutir temas delicados como el estado de inmigración. Dos pediatras también indicaron que sus prácticas habían desarrollado protocolos operativos para que el personal supiera qué pasos tomar si oficiales de inmigración entraban al consultorio. Algunos pediatras dijeron que han organizado eventos o proporcionado referencias para ayudar a las familias a entender sus derechos y a planificar en caso que sean detenidos o deportados. Muchos pediatras también informaron que escribieron cartas para ayudar a las familias involucradas en los procedimientos de deportación.

“…Colocamos carteles en toda la oficina indicando que son bienvenidos o todos son bienvenidos… Tenemos letreros en la entrada… que no discriminamos por status migratorio y que los refugiados e inmigrantes son bienvenidos en nuestra oficina … Y eso es algo que implementamos después de las elecciones…” –Pediatria, Chicago

“…Creamos un prendedor que dice ‘todos son bienvenidos’. Fue realmente un gran esfuerzo hacerlos… declaraciones generales que los niños eran bienvenidos … que la comunidad los estaba apoyando … y creo que eso ayudó a las familias refugiadas a sentir que la comunidad las apoyaría…” –Pediatria, Vermont

“Así que hemos visto un gran aumento en el número de personas que están pidiendo cartas solo para tenerlas, ya sea por razones de seguridad o para dárselas a un abogado o algo así.” –Pediatria, Arkansas

Algunos pediatras expresaron su preocupación acerca de la ambigüedad de las fronteras en torno a los espacios seguros y la incertidumbre sobre cómo aconsejar a las familias en medio del entorno actual. Por ejemplo, un pediatra indicó que, si bien el hospital en sí mismo puede ser un lugar seguro, no está claro hasta dónde se extiende ese límite y si la protección llega al estacionamiento. Un pediatra señaló que los consultorios cerca de la frontera entre los Estados Unidos y México informan una mayor presencia de patrullas fronterizas en estacionamientos de clínicas y dijo que su presencia disuade a los padres de llevar a sus hijos a atenderse. Además, algunos pediatras destacaron los desafíos al desarrollar políticas y protocolos para el personal en asuntos relacionados con la inmigración debido a que el ambiente cambia constantemente.

Efectos sobre la participación en Medicaid/chip y otros programas

Los padres generalmente informaron que mantienen la cobertura de Medicaid y CHIP para sus hijos, pero hubo algunos informes de una menor participación éstos y otros programas. La mayoría de los participantes tienen a sus hijos inscriptos en Medicaid y CHIP y dijeron que tienen la intención de mantenerlos inscriptos. Los padres dijeron que valoran mucho la cobertura de Medicaid y CHIP, que les permite acceder a la atención necesaria para sus hijos. Sin embargo, algunos padres y pediatras informaron que algunas familias con niños elegibles están menos interesadas en inscribirse en Medicaid y CHIP. Además, una clínica señaló que algunos pacientes solicitaron que se cancelara su inscripción porque temen que puedan poner en riesgo a miembros de la familia indocumentados o poner en peligro el estado legal de los miembros de la familia. Los pediatras dijeron que han observado disminuciones más pronunciadas en la participación en el programa de nutrición para mujeres, bebés y niños (WIC) y el Programa de Asistencia de Nutrición Suplementaria (SNAP). Creen que es más probable que los padres vean WIC y SNAP como programas federales que podrían exponer su información a las autoridades. Los padres y los pediatras también notaron preocupaciones constantes en la comunidad sobre que el uso de Medicaid, CHIP y otros programas afectarán negativamente el estatus migratorio de las personas con estatus legal o que buscan residencia o ciudadanía. Los participantes consideraron que sería útil si las fuentes oficiales proporcionaran más información sobre cómo el uso de los beneficios podría afectar el estatus migratorio de las familias. Algunos pediatras indicaron que no están seguros de cómo aconsejar a las familias sobre el uso de los beneficios y la inscripción en los programas, ya que las políticas podrían cambiar. Por ejemplo, un pediatra indicó que es más cautelosa al alentar a las familias a inscribirse en SNAP porque hacerlo podría tener consecuencias negativas si cambian las políticas.

“Personalmente, tengo miedo de tratar de obtener mi MassHealth [Medicaid] o algo de nuevo, debido a mi permiso … Están solicitando muchos documentos …” –Padre latino, Boston, Massachusetts

“…también le piden toda su información e ICE irá a su casa y esa es la razón por la que aún no aplica, porque están pidiendo toda la información sobre todos, sus cónyuges, sus hijos.” -Padre latino, San Diego, California

“…desde que me hice residente me dijeron que no pidiera nada al gobierno porque el día que vas y pides tu ciudadanía puedes tener problemas. Eso es lo que siempre escuché.” –Padre latino, San Diego, California

“He oído sobre los cupones de alimentos, que si consigues que el gobierno te ayude, va a afectar tu estatus.” –Padre latino, Los Angeles, California

“Empecé a escuchar… preguntas sobre si deben o no acceder a los servicios… Entonces, algunas madres primerizas con recién nacidos preguntan si deberían inscribir a su hijo que es ciudadano de los Estados Unidos. Y nació aquí en este país, si deberían inscribir a su hijo en WIC. E, incluso, en algunas circunstancias, decidieron no presentar la solicitud aunque hubieran calificado…” –Pediatria, District of Columbia

“Lo que están haciendo cada vez más las familias es no recibir cupones de alimentos, no tomar WIC, no querer tomar los servicios federales porque tienen miedo …” –Pediatria, Vermont

“No hemos visto una caída entre las familias que ya están inscritas, pero hemos visto familias que no habían aplicado anteriormente y deciden no seguir adelante [con la inscripción en Medicaid o CHIP].” —Pediatria, Minnesota

“…Me he dado cuenta que cada vez más personas que antes no tenían miedo de recibir… servicios como SNAP, por ejemplo, están muy nerviosos por eso. Y entonces tuve dos familias la semana pasada que no querían obtener esos servicios aunque los necesitaran… y luego una familia que estaba nerviosa incluso por volver a solicitar Medicaid, porque… pensaron que pondría en peligro la capacidad del padre para obtener una visa.” –Pediatria, California

“…Yo personalmente no los aliento de la misma manera, mientras que antes tenía mucha más confianza al decir, ‘esto no es un problema para ti, no te preocupes, si inscribes a tu hijo que nació aquí, no te afectará para nada’. No sé si eso es verdad, así que no puedo, ya no digo eso con esa confianza.” –Pediatria, California

La mayoría de los padres participantes no tienen seguro y dicen que se retrasan o no reciben atención médica debido al costo. Aquellos que son indocumentados no son elegibles para Medicaid y generalmente no tienen acceso a cobertura privada. Principalmente dependen de clínicas, pero a menudo evitan buscar atención debido al costo. Los padres con estatus legal tenían más probabilidades de tener cobertura, a menudo a través de Medicaid, y podían acceder mejor a la atención necesaria.

Implicaciones de largo plazo para los niños

Los pediatras expresaron una preocupación significativa sobre las consecuencias a largo plazo del ambiente actual para los niños. Señalaron una investigación de larga data sobre los efectos dañinos del estrés tóxico sobre la salud física y mental a lo largo de la vida (Cuadro 1). Creen que el entorno actual está creando estrés tóxico para los niños y que este estrés dará lugar a cambios fisiológicos que contribuyen a un aumento de las tasas de enfermedades crónicas y trastornos de salud mental hasta la edad adulta. Un pediatra que atiende a familias cerca de la frontera con México señaló que el estrés para los niños en ese medio ambiente es extremo, particularmente debido a la presencia visual constante de la patrulla fronteriza y la militarización del área, que según indicó, ha aumentado desde las elecciones presidenciales. Los pediatras expresaron su preocupación que las disminuciones en la participación en WIC y SNAP afectarán negativamente el desarrollo saludable de los niños. De manera similar, advirtieron que las reducciones en el uso de la atención médica podrían generar condiciones más serias y costosas. Algunos pediatras expresaron su preocupación que la mayor cantidad de tiempo que las familias pasan a puertas cerradas comprometerá el desarrollo de los niños y reducirá sus oportunidades de enriquecimiento y actividad física. Los pediatras también enfatizaron que la pérdida de un padre debido a la deportación afecta negativamente la salud y el desarrollo de los niños de múltiples maneras, incluida la pérdida de apoyo económico y social, y la interrupción del vínculo entre padres e hijos.

“No quiero que estos niños vayan a la escuela ansiosos y deprimidos y no puedan concentrarse, pero también me preocupa lo que le está haciendo al corazón y al hígado.” –Pediatria, District of Columbia

“Cuando te preocupas todos los días por que se lleven a tus padres o que tu familia se divida, que realmente es una forma de estrés tóxico… sabemos que tendrá implicaciones a largo plazo para la enfermedad cardíaca, para los resultados de salud para estos niños en la edad adulta.”                  –Pediatria, Minnesota

“Creo que vamos a tener una generación de niños que, especialmente en nuestros hogares de inmigrantes, van a tener más experiencias infantiles adversas de las que tendrían. Por lo tanto, creo que estamos creando esta generación de niños para que tengan una mayor incidencia de enfermedades crónicas, mayor incidencia de mala salud mental, mayor incidencia de adicciones…” –Pediatria, California

“Creo que una gran preocupación es que los niños que tienen problemas que son menores y reparables ahora… eso, si esos niños no reciben tratamiento, podrían terminar siendo problemas mayores en el futuro que serán más difíciles de tratar y realmente van a afectar la calidad de vida del niño.” –Pediatria, Pennsylvania

“Creo que esa es una de las cosas que más me preocupan, desde un punto de vista de la exposición desde hace mucho tiempo, es que los niños pierden la oportunidad de tener cualquier tipo de experiencias de enriquecimiento porque las familias tienen miedo de hacer cualquier cosa que no sea esencial. Así que creo que es cierto, especialmente en el verano donde cuidamos a muchas de las familias, los niños estaban en casa viendo televisión todo el día porque los padres se sentían incómodos al salir de la casa…” –Pediatria, North Carolina

“Si tus padres temen ir a trabajar, entonces tienes problemas de inseguridad alimentaria. Si no se registran para obtener diferentes beneficios y tienes problemas de inseguridad alimentaria… quiero decir, creo que esto afecta a los niños en tantas, tantas formas que ni siquiera podemos entender. Entonces tenemos niños que tienen hambre, los niños que tienen hambre no pueden aprender. Tenemos niños que están estresados, los niños que están estresados no pueden aprender. Tenemos niños que están en familias necesitadas o tienen padres que están angustiados… están preocupados por sus padres, no pueden aprender. No pueden ser niños normales. No pueden jugar. No pueden desarrollarse. No pueden crecer.” –Pediatria, Vermont

Box 1: Investigación sobre los efectos del estrés tóxico en el aprendizaje, la conducta y la salud

El estrés tóxico puede afectar de manera negativa el desarrollo físico, cognitivo y emocional de un niño. Cuando los niños experimentan estrés continuo y prolongado, conocido como “estrés tóxico”, puede dañar las conexiones en el cerebro, resultando en problemas con el desarrollo del cerebro y efectos negativos de largo plazo en la salud física y mental.

Un cuerpo creciente de literatura encuentra que la amenaza de la detención y deportación de los padres es un estrés tóxico6 . Los niños que viven con la amenaza constante de la deportación de sus padres pueden tener un constante y elevado estado de ansiedad que no permite que el cuerpo vuelva a su funcionamiento basal. La American Academy of Pediatrics recientemente advirtió que el estrés de vivir con miedo a la deportación entre los niños inmigrantes podría interrumpir los procesos de desarrollo del niño y conducir a problemas de salud a largo plazo.7 

La investigación muestra que el estrés tóxico tiene efectos en la salud física, mental y del comportamiento a corto y largo plazo8 . A corto plazo, el estrés tóxico puede aumentar el riesgo y la frecuencia de las infecciones en niños, ya que los altos niveles de hormonas del estrés suprimen al sistema inmune. También puede provocar problemas de desarrollo debido a la reducción de las conexiones neuronales en áreas importantes del cerebro. El estrés tóxico está asociado con el daño a las áreas del cerebro responsables del aprendizaje y la memoria. A largo plazo, el estrés tóxico se puede manifestar como una mala capacidad de afrontar y manejar el estrés, estilos de vida poco saludables, adopción de conductas de salud riesgosas y problemas de salud mental, como depresión. El estrés tóxico también se asocia con mayores tasas de afecciones físicas en la edad adulta, que incluyen enfermedad pulmonar obstructiva crónica, obesidad, cardiopatía isquémica, diabetes, asma, cáncer y trastorno de estrés postraumático.

Los pediatras y los padres describieron cómo la deportación y la revocación de DACA constituyen un desafío para las familias y aumentan el riesgo de pobreza cíclica. Los pediatras y los padres señalaron que perder a un miembro de la familia por deportación a menudo resulta en la pérdida del ingreso familiar, lo que lleva a tensiones financieras y, a veces, a la inseguridad alimentaria y de la vivienda. Un pediatra observó un aumento en la falta de vivienda entre los niños debido a la pérdida de miembros de la familia y los ingresos. Los pediatras dijeron que estas pérdidas de ingresos aumentarán la probabilidad de pobreza cíclica entre las familias. También notaron que muchos jóvenes con DACA estaban buscando educación y carreras que pudieran sacar a sus familias de la pobreza y que esta oportunidad se pierde con la revocación de DACA. Han observado que algunos adolescentes, especialmente aquellos que son indocumentados o que tienen DACA, han perdido la esperanza en el futuro y están reconsiderando los planes para asistir a la universidad o buscar ciertas oportunidades laborales. Dijeron que esta pérdida de esperanza y perspectivas negativas para el futuro podrían afectar sus elecciones de vida y limitar sus logros potenciales y ganancias económicas. Los padres y pediatras también expresaron su preocupación que las familias inmigrantes se alienen cada vez más de sus comunidades más amplias como resultado del ambiente actual. A los pediatras les preocupa que esta situación pueda llevar a las familias a sentirse más aisladas y que los niños puedan enfrentar desafíos para construir sus identidades.

“…no solo está estableciendo un riesgo social basado solo en el estatus migratorio, sino que ahora también se basa en todos los demás determinantes sociales de la salud. Así que las familias que viven en una familia monoparental, es decir, uno de los padres fue deportado y son una familia monoparental ahora están en riesgo de pobreza, en riesgo de inequidad educativa, en riesgo de todas estas otras cosas que sabemos que son también experiencias adversas para la infancia, pero luego colocan a los niños en riesgo de efectos a largo plazo.” –Pediatria, North Carolina

“En Brownsville tenemos alrededor de 1,700 escolares que no tienen un hogar. Muchos de esos niños carecen de hogar a causa de un padre que fue deportado o encarcelado.” –Pediatria, Texas

“Muchos de estos niños enfrentarán inseguridad con respecto a la vivienda, la comida, a las necesidades básicas … A largo plazo, la economía y la estabilidad y la angustia emocional …” –Pediatria, Illinois

“Así que creo que hay muchos efectos secundarios… los cambios en el programa DACA no afectan solo al destinatario de DACA, sino a sus padres si están ayudando… a los niños… a sus hermanos, a cualquier otra persona del hogar…” –Pediatria, District of Columbia

“…dependiendo lo que ocurra con el programa DACA, hay tantos niños en nuestra comunidad a los que ayudó, que continuaron hasta la universidad para obtener su título … Creo que sería una pérdida terrible, no solo el estudiante y sus familias, pero para toda la comunidad si el trabajo que pudieron hacer porque obtuvieron DACA se detuviera acá.” –Pediatria, Arkansas

“…Mis hijos nacieron y crecieron aquí y no fue su elección… cuando crezcan, me temo que también podrían estar alienados.” – Padre coreano, Chicago, Illinois

“…No saber si puedes o no quedarte, sentir que no perteneces, no tener un pie adentro, como un dedo del pie en un lugar al que puedas llamar hogar. Me refiero a las implicaciones a largo plazo, creo que está afectando cómo formulan sus identidades.” –Pediatria, Illinois

Conclusión

En conjunto, estos hallazgos muestran que las familias inmigrantes en diferentes entornos y ubicaciones están sintiendo un aumento en los niveles de miedo e incertidumbre en medio del clima actual. Los padres y los niños de familias en las que un miembro es indocumentado temen separarse, y aquéllos con estatus legal se preocupan por la seguridad y la estabilidad de su estatus, y por si pueden verse afectados en el futuro por cambios en la política. Los hallazgos muestran que estos temores tienen efectos amplios en la vida cotidiana y las rutinas de algunas familias inmigrantes que temen abandonar su hogar, lo que limita su participación en actividades, y los confronta con mayores desafíos laborales. Además, señalan las consecuencias a largo plazo para los niños de familias inmigrantes, incluidos peores resultados de salud a lo largo de la vida, crecimiento y desarrollo comprometidos, y mayores desafíos en una variedad de factores sociales y ambientales que influyen en la salud.

Este informe fue preparado por Samantha Artiga y Petry Ubri, de la Kaiser Family Foundation. Las autoras agradecen a Blue Shield of California Foundation por su apoyo con los grupos de discusión y las entrevistas realizadas en California. También agradecen a la American Academy of Pediatrics por su ayuda identificando pediatras para entrevistar para este trabajo. Finalmente, expresan su aprecio profundo a los padres y pediatras que compartieron su tiempo y experiencias para este informe.

Apéndice

Apéndice 1: Cambios recientes en la política de inmigración, 2017

Orden ejecutiva: “Proteger a la nación de la entrada de terroristas extranjeros en los EE.UU.”, Enero de 2017: se suspende la entrada de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana (Irak, Irán, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen) a los EE.UU. por 90 días, así como la entrada de todos los refugiados por 120 días (y una prohibición indefinida de los refugiados sirios), con una excepción para las minorías religiosas. Estados, y otros grupos, impugnaron la orden, lo que resultó en una orden de restricción temporal contra el cumplimiento de la prohibición. En marzo de 2017, la Administración revisó la orden, eliminando la prohibición a los ciudadanos de Irak, la prohibición indefinida de los refugiados sirios y la excepción para las minorías religiosas. En junio de 2017, la Corte Suprema permitió que una versión limitada de la prohibición revisada entrara en vigor, pero finalmente desestimó las impugnaciones legales a la prohibición antes de decidir sobre sus méritos en octubre de 2017, después que la prohibición expirara. En septiembre de 2017, la Administración liberó una nueva prohibición dirigida principalmente a países de mayoría musulmana, manteniendo a Irán, Libia, Somalia, Siria y Yemen en la lista, eliminando a Sudán y añadiendo también a Chad, Corea del Norte y Venezuela. Esta versión de la prohibición suspendió la entrada de la mayoría de los ciudadanos de estos países de forma indefinida (excepto Venezuela, donde se limita a los funcionarios del gobierno y sus familias) y mejoró los requisitos de selección e investigación. El 4 de diciembre de 2017, la Corte Suprema, aunque no se pronunció sobre los méritos, permitió que esta prohibición entrara plenamente en vigencia mientras sigue siendo impugnada en los Circuitos Cuarto y Noveno, y se abre camino hacia la Corte Suprema. El 24 de octubre de 2017 se emitió una cuarta prohibición que exige que los refugiados de 11 países de mayoría musulmana (Egipto, Irán, Irak, Libia, Mali, Corea del Norte, Somalia, Sudán, Sudán del Sur, Siria y Yemen) sean sometidos a exámenes exhaustivos antes de ingresar a los Estados Unidos, y evitar que los familiares de refugiados se unan a ellos en EE.UU. Esta prohibición también está siendo impugnada en los tribunales federales.

Orden ejecutiva: “Mejorar la seguridad pública en el interior de los EE.UU.”, enero de 2017: se amplía la categoría de personas clasificadas como “prioridades para la expulsión”, priorizando a los inmigrantes indocumentados que han cometido, han sido acusados o condenados por un delito penal, así como aquellos que han “cometido actos que constituyen un delito imputable”, incluso si nunca son condenados por un delito. También descalifica a las “ciudades santuario” o jurisdicciones que limitan su papel en la aplicación de la ley de inmigración civil, para recibir subvenciones federales. Estas ciudades están desafiando la restricción de las subvenciones federales, incluida la financiación de la aplicación de la ley a las “ciudades santuario”, en los tribunales. El Tribunal de Distrito de EE. UU. bloqueó de manera permanente la disposición de “ciudades santuario”. La Administración más tarde redujo el alcance de la disposición, pero las ciudades siguen desafiando las nuevas condiciones de las subvenciones federales.

Orden ejecutiva: “Compre americano, Contrate americano”, abril de 2017: alienta a los empleadores a verificar todas las nuevas contrataciones a través de e-verify y llama a reformas al programa de visas H1B que permite a los empleadores encontrar trabajadores con conocimientos altamente especializados fuera de los EE.UU.

Orden Ejecutiva para Rescindir el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), septiembre de 2017: rescinde de DACA, que permite que ciertos jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños tengan permiso para permanecer en los Estados Unidos y trabajar por períodos temporales renovables. DACA ha protegido a casi 800,0009  jóvenes indocumentados en los últimos cinco años y actualmente protege a casi 690,000 inmigrantes10 . La Administración revocó DACA en septiembre de 2017 y ya no acepta solicitudes o renovaciones11 .

Finalización de la designación de TPS para Nicaragua, noviembre de 2017: finaliza la designación de TPS para Nicaragua a partir del 5 de enero de 2019. Las personas que actualmente residen en los Estados Unidos bajo este estatus de TPS deben obtener un estatus migratorio legal alternativo para permanecer en el país12 .

Terminación del programa de refugiados de los menores de América Central (CAM), noviembre de 2017: las solicitudes de CAM dejaron de ser aceptadas el 9 de noviembre de 2017, y las entrevistas para los casos de CAM finalizarán el 31 de enero de 2018.13 

Terminación de la designación de TPS para Haití, noviembre de 2017: finaliza la designación de TPS para Haití a partir del 22 de julio de 2019. Las personas que actualmente residen en los Estados Unidos bajo este estatus de TPS deben obtener un estatus de inmigración legal alternativo para permanecer en el país. Se requerirá que los haitianos con TPS vuelvan a solicitar documentos de autorización de empleo para trabajar legalmente en los EE. UU. hasta la fecha de finalización.14 

Apéndice 2: Estatus migratorio y elegibilidad para la cobertura de salud

Estatus migratorio

Los inmigrantes con presencia legal son no-ciudadanos que residen legalmente en los EE.UU. Este grupo incluye:

  • Residentes permanentes legales (LPR o titulares de la “Green card “): a las personas a las que se les ha otorgado permiso para residir y trabajar permanentemente en los EE.UU. se les puede otorgar la residencia permanente legal mientras se encuentran en el extranjero u obtener el estatus permanente dentro de los EE. UU.15 
  • Refugiados: personas que están en riesgo o han sido perseguidos en sus países de origen y que no pueden regresar porque temen un daño grave16 . Se puede otorgar la condición de refugiado a personas que están fuera de los Estados Unidos; aquellos que huyen a los EE.UU. pueden solicitar asilo o retención de expulsión una vez que están en el país.
  • Personas con asilo: personas que cumplen la misma definición de refugiados pero que ya se encuentran en los EE.UU. o que buscan admisión en un puerto de entrada.17 
  • Otras personas que están autorizadas para vivir en los EE.UU. de forma temporal o permanente.

Los inmigrantes indocumentados son personas nacidas en el extranjero que residen en los EE.UU. sin autorización. Este grupo incluye personas que ingresaron al país sin autorización, así como personas que ingresaron legalmente al país y se quedaron después de que expiró su visa o estatus.

El programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que se estableció en 2012, permitió que ciertos jóvenes indocumentados que llegaron a los EE.UU. Cuando eran niños recibieran permiso para permanecer en el país por períodos temporales renovables. La Administración rescindió DACA en septiembre de 2017 y ya no acepta solicitudes o renovaciones.18 

Elegibilidad para programas de cobertura de salud

Los inmigrantes legalmente presentes pueden calificar para Medicaid y CHIP sujetos a ciertas restricciones. En general, los inmigrantes legalmente presentes deben tener un estatus migratorio “calificado” para ser elegibles para Medicaid o CHIP y muchos, incluyendo la mayoría de los LPR o titulares de la green card, deben esperar cinco años después de obtener el estatus calificado antes de poder inscribirse. Algunos inmigrantes, como aquellos con un estatus de protección temporal, están legalmente presentes, pero no tienen un estatus que califica y no son elegibles. Algunos inmigrantes, como refugiados y personas con asilo, no tienen que esperar cinco años antes de inscribirse. Para los niños y las mujeres embarazadas, los estados pueden optar por eliminar la espera de cinco años y extender la cobertura a los inmigrantes legalmente presentes sin un estatus calificado.

Los inmigrantes legalmente presentes pueden comprar cobertura a través de los mercados de salud establecidos por la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA) y pueden recibir subsidios para esta cobertura. Estos subsidios están disponibles para personas con ingresos del 100% al 400% del nivel federal de pobreza que no son elegibles para otra cobertura. Además, los inmigrantes legalmente presentes con ingresos por debajo del 100% del nivel federal de pobreza pueden recibir subsidios si no son elegibles para Medicaid en función del estado migratorio. Este grupo incluye inmigrantes legalmente presentes que no son elegibles para Medicaid o CHIP porque están en el período de espera de cinco años o porque no tienen un estatus que califique.

Los inmigrantes indocumentados y las personas que reciben DACA no son elegibles para inscribirse en Medicaid o CHIP o para comprar cobertura a través de los Mercados de ACA.

Endnotes

  1. Kaiser Family Foundation, Health Coverage and Care for Immigrants, (Washington, DC: Kaiser Family Foundation, December 2017), https://modern.kff.org/disparities-policy/fact-sheet/health-coverage-of-immigrants/. ↩︎
  2. Ibid. ↩︎
  3. Kaiser Family Foundation, Health Coverage and Care for Immigrants, (Washington, DC: Kaiser Family Foundation, December 2017), https://modern.kff.org/disparities-policy/fact-sheet/health-coverage-of-immigrants/. ↩︎
  4. Ibid. ↩︎
  5. Since these groups were conducted, the Department of Homeland Security announced that TPS will be eliminated for people from Nicaragua effective January 5, 2019. Department of Homeland Security, Acting Secretary Elaine Duke Announcement on Temporary Protected Status for Nicaragua and Honduras, (Washington, DC: Department of Homeland Security, November 6, 2017), https://www.dhs.gov/news/2017/11/06/acting-secretary-elaine-duke-announcement-temporary-protected-status-nicaragua-and. ↩︎
  6. Lisa M Edwards and Jacki Black, Stress Related to Immigration Status in Students: A Brief Guide for Schools, (Milwaukee, WI: Marquette University: February 2017), http://www.marquette.edu/education/news/documents/Immigration-RelatedStress-AGuideforSchools.pdf; Omar Martinez, Elwin Wu, Theo Sandfort, et. al., “Evaluating the Impact of Immigration Policies on Health Status Among Undocumented Immigrants: A Systematic Review,” Journal of Immigrant and Minority Health 17, 3 (June 2015):947-970; Human Impact Partners, Family Unity, Family Health: How Family-Focused Immigration Reform Will Mean Better Health for Children and Families, (Oakland, CA: Human Impact Partners, June 2013), http://www.familyunityfamilyhealth.org/uploads/images/FamilyUnityFamilyHealth.pdf; Jorge Delva, Pilar Horner, Ramiro Martinez, et. al., “Mental Health Problems of Children of Undocumented Parents in the United States: A Hidden Crisis,” Journal of Community Positive Practices XIII, 3 (2013):25-35; Karen Hacker, Jocelyn Chu, Carolyn Leung, et. al., “The Impact of Immigration and Customs Enforcement on Immigrant Health: Perceptions of Immigrants in Everett, Massachusetts, USA,” Social Science & Medicine 73, 4 (August 2011):586-594; David K Androff, Cecilia Ayon, David Becerra, et. al., “U.S. Immigration Policy and Immigrant Children’s Well-being: The Impact of Policy Shifts,” The Journal of Sociology & Social Welfare 38, 1 (March 2011):77-98; Ajay Chaudry, Randy Capps, Juan Manuel Pedroza, et. al., Facing Our Future: Children in the Aftermath of Immigration Enforcement, (Washington, DC: Urban Institute, February 2010), https://www.urban.org/sites/default/files/publication/28331/412020-Facing-Our-Future.PDF; Randy Capps, Rosa Maria Castañeda, Ajay Chaudry, and Robert Santos, Paying the Price: The Impact of Immigration Raids on America’s Children, Prepared for the National Council of La Raza, (Washington, DC: Urban Institute, 2007): https://www.urban.org/sites/default/files/publication/46811/411566-Paying-the-Price-The-Impact-of-Immigration-Raids-on-America-s-Children.PDF. ↩︎
  7. American Academy of Pediatrics (AAP), “AAP Statement on Protection Immigrant Children,” [Website], January 25, 2017, Accessed September 18, 2017, https://www.aap.org/en-us/about-the-aap/aap-press-room/Pages/AAPStatementonProtectingImmigrantChildren.aspx. ↩︎
  8. Center on the Developing Child, NGA Center for Best Practices, and National Conference on State Legislatures, In Brief: The Impact of Early Adversity on Children’s Development, (Cambridge, MA: Center on the Developing Child, Harvard University, 2015), https://46y5eh11fhgw3ve3ytpwxt9r-wpengine.netdna-ssl.com/wp-content/uploads/2015/05/inbrief-adversity-1.pdf; Hillary A Franke, “Toxic Stress: Effects, Prevention and Treatment,” Children 1 (2014):390-402; Sara B Johnson, Anne W Riley, Douglas A Granger, and Jenna Riis, “The Science of Early Life Toxic Stress for Pediatric Practice and Advocacy,” Pediatrics 131, 2 (February 2013):319-327; Jack P Shonkoff, Andrew S Garner, et. al., “The Lifelong Effects of Early Childhood Adversity and Toxic Stress,” Pediatrics 129, 1 (2012):e232-e246; Committee on Psychosocial Aspects of Child and Family Health, et. al., “Early Childhood Adversity, Toxic Stress, and the Role of the Pediatrician: Translating Developmental Science into Lifelong Health,” Pediatrics 129, 1(2012):e224-e231; National Scientific Council on the Developing, Child Persistent Fear and Anxiety Can Affect Young Children’s Learning and Development: Working Paper No. 9, (Cambridge, MA: National Scientific Council on the Developing Child, 2010), http://www.developingchild.net; Jack P Shonkoff, W Thomas Boyce and Bruce S McEwen, “Neuroscience, Molecular Biology, and the Childhood Roots of Health Disparities: Building a New Framework for Health Promotion and Disease Prevention,” Journal of the American Medical Association 301, 201 (2009):2252-2259; Jennifer S Middlebrooks and Natalie C Audage, The Effects of Childhood Stress on Health Across the Lifespan, (Atlanta, GA: Centers for Disease Control and Prevention (CDC), 2008), http://health-equity.lib.umd.edu/932/1/Childhood_Stress.pdf; Stanley D Rosenberg, Weili Lu, Kim T Mueser, et. al., “Correlates of Adverse Childhood Events Among Adults with Schizophrenia Spectrum Disorders,” Psychiatric Services 58, 2 (2007): 245-253; Shanta R Dube, Robert F Anda, Vicent J Felitti, et. al., “Childhood Abuse, Household Dysfunction, and the Rise of Attempted Suicide Throughout the Life Span: Findings from the Adverse Childhood Experiences Study,” JAMA 286, 24 (December 2001): 3089-3096; Vincent J Felitti, Robert F Anda, Dale Nordenberg, et. al., “Relationship of Childhood Abuse and Household Dysfunction to Many of the Leading Casues of Death in Adults: The Adverse Childhood Experiences (ACE) Study,” American Journal of Preventive Medicine 14, 4 (1998):245-258. ↩︎
  9. U.S. Citizenship and Immigration Services, Data Set: Form I-821D Deferred Action for Childhood Arrivals as of June 30, 2017, (Washington, DC: U.S. Citizenship and Immigration Services, September 20, 2017), https://www.uscis.gov/sites/default/files/USCIS/Resources/Reports%20and%20Studies/ Immigration%20Forms%20Data/All%20Form%20Types/DACA/daca_performancedata_fy2017_qtr3.pdf. ↩︎
  10. U.S. Citizenship and Immigration Services, Approximate Active DACA Recipients: Country of Birth As of September 4, 2017, (Washington, DC: U.S. Citizenship and Immigration Services, September 4, 2017), https://www.uscis.gov/sites/default/files/USCIS/Resources/Reports%20and%20Studies/ Immigration%20Forms%20Data/All%20Form%20Types/DACA/daca_population_data.pdf. ↩︎
  11. National Immigration Law Center, “DACA,” [Website], Accessed December 1, 2017, https://www.nilc.org/issues/daca/. ↩︎
  12. U.S. Department of Homeland Security, “Acting Secretary Elaine Duke Announcement on Temporary Protected Status for Nicaragua and Honduras,” [Press Release], November 6, 2017, Accessed December 1, 2017, https://www.dhs.gov/news/2017/11/06/acting-secretary-elaine-duke-announcement-temporary-protected-status-nicaragua-and. ↩︎
  13. U.S. Citizenship and Immigration Services, “In-Country Refugee/Parole Processing for Minors in Honduras, El Salvador and Guatemala (Central American Minors – CAM),” [Website], November 15, 2017, Accessed December 1, 2017, https://www.uscis.gov/CAM. ↩︎
  14. U.S. Department of Homeland Security, “Acting Secretary Elaine Duke Announcement on Temporary Protected Status for Haiti,” [Press Release], November 20, 2017, Accessed December 1, 2017, https://www.dhs.gov/news/2017/11/20/acting-secretary-elaine-duke-announcement-temporary-protected-status-haiti. ↩︎
  15. U.S. Citizenship and Immigration Services, “Permanent Resident Alien,” [Website], Accessed December 1, 2017, https://www.uscis.gov/tools/glossary/permanent-resident-alien. ↩︎
  16. U.S. Citizenship and Immigration Services, “Refugees & Asylum,” [Website], Accessed December 1, 2017, https://www.uscis.gov/humanitarian/refugees-asylum. ↩︎
  17. Ibid. ↩︎
  18. National Immigration Law Center, “DACA,” [Website], Accessed December 1, 2017, https://www.nilc.org/issues/daca/. ↩︎

The Trump Administration’s Hidden Attacks on the Affordable Care Act

Published: Jan 5, 2018

In a Washington Post op-ed, “The Trump administration’s hidden attacks on the Affordable Care Act,” Larry Levitt discusses the latest proposed regulations by the Trump administration to expand association health plans: changes that could wound the ACA insurance marketplace, but are unlikely to make it collapse.

Growth in Prescription Spending Has Slowed Again in 2016, After Increasing Rapidly in 2014 and 2015

Published: Jan 4, 2018

Source

Peterson-Kaiser Health System Tracker; Kaiser Family Foundation analysis of National Health Expenditure (NHE) Historical (1960-2016) data from Centers for Medicare and Medicaid Services, Office of the Actuary, National Health Statistics Group (Accessed on December 13, 2017)

Voces de Puerto Rico: Reflexiones Dos Meses Después de María (Informe)

Authors: Samantha Artiga and Barbara Lyons
Published: Dec 21, 2017

Resumen

Dos meses después que el huracán María tocara tierra, la Kaiser Family Foundation viajó a Puerto Rico para realizar grupos de discusión y entrevistas individuales con individuos afectados por la tormenta. Hablamos con 40 personas de 10 regiones diferentes de la isla (Apéndice 1, fotos de participantes seleccionados en las páginas siguientes). Haga click aquí para ver un video complementario. Los resultados muestran:

  • El huracán María fue un evento aterrador y traumático para los participantes y sus niños. Varios sufrieron daños significativos en sus hogares y propiedades, y algunos lo perdieron todo.
  • La tormenta tuvo efectos negativos significativos en la salud física y mental, y muchos participantes continúan experimentando depresión, estrés y ansiedad.
  • Dos meses después de la tormenta, los participantes seguían enfrentando desafíos para satisfacer necesidades básicas, y la vida cotidiana seguía siendo extremadamente difícil por la falta de electricidad y las limitadas opciones de trabajo.
  • Los participantes sintieron que los esfuerzos de recuperación han sido lentos e insuficientes.
  • A pesar de estos desafíos, muchos creen que Puerto Rico se recuperará, aunque reconocen que la recuperación demorará muchos años, y creen que las personas mismas tienen un papel importante que desempeñar en la recuperación.

“Pensé que nunca iba a terminar. Nos quedamos en la ventana, mirando lo que le estaba pasando a mi casa. El viento y la lluvia no paraban… Fue interminable”

“Vi todo el proceso de lo que le pasó a mi casa. Fue una pérdida total. Mi papá estaba llorando por su impotencia frente a esa situación.”

“El lugar en donde me sentí bien fue en el baño. Si tuve que llorar, lloré. Y a veces traté de amortiguar mi llanto con la cortina de baño.”

“No estuve trabajando por largo tiempo, porque solía trabajar en las escuelas y, si no están abiertas, no trabajo… eso me generó mucha ansiedad… porque… solía ser yo quien ganaba dinero.”

“… después de dos meses, todavía hay personas que no pueden ser localizadas porque no hay camino, no pueden abandonar sus hogares. No pueden conseguir comida.”

“Lleva tanto, tanto tiempo que me pregunto cómo es posible que no se les dé prioridad a las personas que perdieron sus hogares.”

“Me gustaría que los puertorriqueños en el exterior y los estadounidenses sepan que aquí hay personas valientes, fuertes y que no se dan por vencidos, porque somos luchadores.”

Informe

SOPORTANDO LA TORMENTA

Soportar la tormenta fue una experiencia aterradora y traumática para los participantes. Algunos hicieron preparativos para la tormenta, mientras que otros anticiparon que la tormenta pasaría por la isla o no sería tan fuerte como se había pronosticado. Muchos se quedaron en sus casas para enfrentar la tormenta y trajeron a familiares y amigos para quedarse con ellos. Otros se quedaron con familiares o amigos que tenían casas más sólidas. Los participantes describieron la fuerza aterradora de los vientos de la tormenta y la lluvia e inundaciones significativas. Dijeron que la tormenta se sentía interminable y les preocupaba el bienestar de los miembros de la familia de los que fueron separados durante la tormenta.

“No creí que llegaría aquí. Quiero decir, pensé que venía, pero no con tanta fuerza.”

“Nos preparamos. Agua, provisiones de emergencia para el hogar, latas, productos no perecederos. Además, tengo un contenedor de plástico, que llamamos ‘Huracán’, en el que guardamos antorchas, velas, todo lo que se pueda necesitar.”

“Le dije a mi esposa e hijos que fueran con mamá, ya que esa casa está hecha de cemento por todas partes.”

“Estuve sosteniendo una puerta durante dos horas para que no se volara… Así que lo hicimos hasta que se nos ocurrió colocar el sofá como una cuña… Y el sofá incluso se movía con el viento… pero eso fue lo mejor que podríamos haber hecho… Pero eso… es algo por lo que no quiero volver a pasar…”

“Mi madre tiene varias condiciones y toma entre doce y catorce medicamentos, y eso me causó un poco de ansiedad… Esa fue mi mayor preocupación, así que los aprovisioné antes que llegara el huracán.”

“Hubo un momento en que el viento se detuvo. Y luego vino por el otro lado… Más tarde, cuando cayó la noche, solo pude mirar hacia arriba y toda la destrucción y me pregunté ‘¿Qué podríamos hacer ahora? ¿Cómo puedo comenzar?’”

“Pensé que no tenía fin. Nos quedamos junto a la ventana, mirando lo que sucedía en mi casa. El viento y la lluvia no se detenían, había cosas volando, los árboles caían. Fue interminable.”

“…Estábamos realmente preocupados, queríamos saber cómo estaban ellos y había cero comunicaciones. Fue bastante desesperante… durante el huracán fue terrible pensar en nuestros abuelos, que es la familia más cercana que tenemos. “

CONSECUENCIA INMEDIATA DE LA TORMENTA

Los participantes tuvieron problemas para satisfacer las necesidades básicas inmediatamente después de la tormenta. Muchos sufrieron daños significativos en sus hogares y propiedades, y algunos lo perdieron todo. Dijeron que, en los días y semanas posteriores a la tormenta, era extremadamente difícil satisfacer las necesidades básicas y que las filas para agua, alimentos, gasolina y dinero, eran de entre 8 y 10 horas. En las semanas posteriores a la tormenta, no hubo comunicaciones en la isla y los viajes por la isla eran difíciles, por lo que fue difícil chequear el bienestar de familiares y amigos. Pocos recibieron ayuda en los días y semanas inmediatamente posteriores a la tormenta. Un aspecto positivo que destacaron varios participantes fue que la tormenta contribuyó al aumento y el fortalecimiento de las relaciones en la comunidad con los vecinos trabajando juntos después de la tormenta.

“Vi todo el proceso de lo que le pasó a mi casa. Fue una pérdida total. Explotó. Un árbol de caoba de 100 años cayó sobre la casa y todo se destruyó … Mi papá estaba llorando por su impotencia frente a esa situación.”

“…parecía que alguien había puesto una ducha en mi casa, toda la casa estaba goteando agua.”

“En casa dividimos las tareas: mis hermanos fueron por gasolina, yo cociné, la abuela me ayudó con los niños. Mamá y mi esposo ordenaron… Sabíamos que, si todos íbamos a buscar gasolina, nunca terminaríamos lo que había que hacer en casa. Esperé en la fila 6 u 8 veces por $10 de combustible. ¡Uno de ellos tomó 6 horas, y al final, fue solo $10!”

“Te parabas en una fila enorme y cuando llegabas al mostrador te decían que solo podías tener dos galones por familia. Y entonces uno pensaba, bueno, en casa somos cinco y bebemos tres galones en un solo día.”

“No había forma de comunicarse. No se podía conducir, había demasiadas cosas bloqueando las carreteras, y no había internet, ni teléfonos celulares……”

“El municipio vino a mi casa con agua y una bolsa de comida hace aproximadamente tres semanas. Pero eso fue hace poco. En esas primeras semanas, no hubo ayuda.”

“Nos hemos acercado más como familia y también con los vecinos.” 

EFECTOS EN LA SALUD FÍSICA Y MENTAL

Los participantes dijeron que el acceso a la atención médica fue limitado y caótico inmediatamente después de la tormenta con personal limitado, hospitales sin electricidad, lesiones y muertes.  Señalaron que las farmacias no podían procesar la información del seguro sin electricidad, por lo que tenían que pagar de su bolsillo. Algunas farmacias proporcionaron medicamentos a crédito y/o sin receta médica para ayudar a garantizar el acceso continuo a la medicación. Los participantes notaron que la capacidad de acceder a la atención médica ha mejorado con el tiempo, pero persisten los desafíos, que incluyen esperas más largas, desafíos de transporte, hospitales, clínicas y farmacias limitadas, con muchos de ellos todavía funcionando con generador de electricidad inconsistente. Varios de los participantes tenían cobertura de salud a través de Reforma, el programa del Medicaid en Puerto Rico, y dijeron que la cobertura es clave para acceder a la atención necesaria para ellos y sus hijos.

“Estaba preocupada por el bebé, debido a los niveles de bilirrubina, y no había sol. Entonces la llevé a la emergencia y la mantuvieron durante 24 horas… en la misma área donde traían a los muertos.”

“La farmacia en el hospital se había quedado sin muchas cosas después de un mes. No es que la farmacia no quiera vendérnoslo, simplemente no está disponible.”

“Puede obtener una cita, pero no tan fácil y no con tanta frecuencia. Lo que hace el médico es darles recetas para un mes completo. Así que vamos a verlo cada mes o mes y medio.”

Varios participantes dijeron que la tormenta discontinuó su acceso a medicamentos y tratamiento. Por ejemplo, varios dijeron que no tenían acceso a la insulina porque no tenían la capacidad de refrigerarla, y un participante no pudo obtener tratamiento de diálisis debido a la falta de electricidad. Los participantes dijeron que ha sido más difícil manejar condiciones crónicas como el asma, la hipertensión y la diabetes debido al estrés y la ansiedad, el acceso limitado a medicamentos y un mayor consumo de alimentos procesados y enlatados y gaseosas debido a dificultades para obtener alimentos frescos.

“Me quedé sin insulina. Me dijeron que pusiera agua tibia en un vaso. Pero vi que la insulina no era translúcida, sino que se había cristalizado, como el azúcar.”

“Para la diabetes de mi abuela, el cambio de dieta ha sido terrible. Está completamente fuera de control. Como no hay electricidad, no podemos comer la misma comida.”

Los participantes también describieron los efectos profundos en su salud mental y emocional. Señalaron que, si bien tratan de ser fuertes para sus hijos y para otros, sienten desesperación en los momentos en los que están solos. Muchos dijeron que se sienten estresados y ansiosos y tienen problemas para dormir por la noche. También dijeron que muchos de sus hijos tienen miedo cada vez que llueve. Varios también se vieron afectados por las muertes que presenciaron o conocieron como resultado de la tormenta.

“Lo que he visto a mi alrededor es la muerte. Personas que se han suicidado. Después del huracán, realmente han estado en situaciones muy tristes.”

“El lugar donde me sentí bien fue el baño. Si tuve que llorar, lloré. Y a veces traté de amortiguar mi llanto con la cortina de baño.”

“Mi esposo se pone histérico. Cuando llega a casa del trabajo, comienza a cavar, con la linterna, e intenta reconstruir el porche. Odia la noche, no duerme.”

“Cuando llueve mucho, una de mis nietas me pide que cierre las ventanas y que vaya al baño con ella. Le digo que se calme, pero no puede.”

LA VIDA DOS MESES DESPUÉS DE LA TORMENTA

La vida cotidiana sigue siendo muy difícil y alterada dos meses después de la tormenta. Los participantes dijeron que algunas necesidades básicas todavía no se han abordado. La mayoría sigue sin electricidad, y donde la corriente ha regresado, sigue siendo impredecible. También señalaron los continuos desafíos para acceder a agua y gasolina, y señalaron que el servicio de celulares y las comunicaciones siguen siendo limitadas en toda la isla. Los participantes describieron las luchas de la vida cotidiana sin electricidad, señalando que no pueden mantener alimentos frescos, no pueden cocinar dentro de su casa y/o usar su lavadora. Hicieron hincapié en que no hay alivio para el calor y los mosquitos, y para el constante ruido y la contaminación del aire de los generadores. También dijeron que aún hay importantes congestiones de tránsito y retrasos en las carreteras debido a que los semáforos no funcionan.

“…extrañamos la comodidad de cosas que solíamos dar por hechas. Como, solíamos levantarnos y podíamos tomar una ducha, era tan simple como poner la ropa en la lavadora, y salir… Tener la comodidad de cocinar dentro de la casa …”

“Incluso ahora no tengo señal en casa. Tengo que salir a la carretera. No puedes comunicarte y las cosas son muy difíciles.”

“Hasta hoy, todavía estoy en modo de supervivencia.”

“Pero ahora con mi papá, tengo que despertar mucho antes. Tuve que llevarlos a casa conmigo, ya que no tienen ni electricidad ni agua desde Irma. Es diabético y tiene problemas, así que tengo que despertar mucho más temprano y tengo que medicarlo y llevarlo a casa, luego llevar a las niñas a la escuela e ir a trabajar.”

Las rutinas diarias de los participantes permanecen interrumpidas. Algunos todavía están desplazados de sus hogares o tienen a familiares o amigos desplazados viviendo con ellos. Algunos niños regresaron a la escuela, pero muchas operan con horarios más cortos. Algunos participantes han regresado al trabajo, pero algunos pasaron muchos días sin trabajar o perdieron sus trabajos. Destacaron que muchos trabajos no están disponibles en este momento debido a la falta de energía eléctrica. Además, es más difícil para los padres trabajar dado el horario escolar más limitado.

“Ha cambiado completamente. Vivimos en un solo espacio… Viendo que los ancianos se levantan … y estaban acostumbrados a sentarse en el balcón. Hoy los encuentras llorando porque no pueden hacerlo. Me afecta. Me adapto, pero me afecta.”

“Ya me he mudado. Busqué un lugar para alquilar porque mi casa debe reconstruirse por completo.”

“Encontré trabajo la semana pasada. Antes de eso no tenía trabajo, desde Irma. Yo era camarero, pero perdí mi trabajo. Porque mi lugar de trabajo se quedó sin electricidad y no pudo operar.”

“…No trabajé durante tanto tiempo, porque solía trabajar en escuelas y, si no están abiertas, no trabajo. Y eso provocó mucha ansiedad … Porque… solía ser yo quien ganaba dinero. Entonces, aunque traté de canalizar todas esas energías, me sentí un poco desesperada.”

OPINIONES SOBRE LOS ESFUERZOS DE RECUPERACIÓN

Los participantes consideran que los esfuerzos de recuperación han sido lentos y que las brechas importantes en las necesidades básicas permanecen dos meses después de la tormenta. No sintieron que el presidente Trump haya brindado mucha ayuda o respeto al pueblo de Puerto Rico. Dijeron que la asistencia de FEMA ha sido lenta y no ha estado bien dirigida. Algunos sintieron que FEMA está actuando con lentitud debido a que los fondos de FEMA fueron mal utilizados por algunas personas después de una tormenta anterior. Además, muchos pensaron que el gobierno local está complicando y ralentizando los esfuerzos de recuperación.

“…después de dos meses, hay personas a las que todavía no se puede llegar porque no hay camino, no pueden abandonar sus hogares. No pueden conseguir comida. Y piensas, mi Dios … ¡pero está llegando tanta!”

“Y cuando él [el presidente Trump] hacía sus locuras, arrojando toallas de papel, no estaba valorando lo que estábamos pasando, nuestro dolor.”

“Lleva tanto, tanto tiempo que me pregunto cómo es posible que a las personas que perdieron sus hogares no se les dé prioridad.”

“Pero también tienen que pensar en la emergencia en la que estamos, ellos [FEMA] no pueden tomarse 60 días para evaluar una casa, cuando es obvio que necesita ayuda.”

“El asunto es que FEMA no puede hacer nada hasta que el municipio y el estado acuerden algo y comiencen a moverse.”

“Creo que FEMA está actuando de manera responsable, siendo muy prudente y estudiando adecuadamente cada caso. Porque… en los otros incidentes, la gente tomaba el dinero y no reparaba sus hogares. “

“Tendría que llamar a [FEMA] tres veces el mismo día y me darían diferentes versiones de la información. Entonces, tendría que tomar nota de sus nombres y la versión que me dieron. Y esta situación es como caminar cuesta arriba, porque estos nuevos empleados no saben qué decir sobre la asistencia…”

PENSAMIENTOS SOBRE EL FUTURO

Los participantes creen que la isla se recuperará, pero que llevará mucho tiempo, probablemente muchos años. Sienten que aún hay grandes necesidades en toda la isla, pero que no hay suficiente reconocimiento de la continua necesidad y sufrimiento. Muchos señalaron que siguen comprometidos con permanecer en la isla y en la recuperación, a pesar de que quedarse es difícil. Otros se van porque ya no pueden encontrar empleo para mantenerse. Muchos tienen familiares y amigos que ya han abandonado la isla. Los participantes desean más transparencia e información sobre los esfuerzos de recuperación, en particular, sobre adónde se dirigen los fondos y los suministros. También creen que el pueblo de Puerto Rico tiene un papel que desempeñar en la recuperación, y que no pueden simplemente sentarse y esperar la asistencia.

“Me gustaría quedarme donde estoy, pero depende de la electricidad y el trabajo. Por el momento, me quedo.”

“Tengo amigos que tienen niños pequeños y se fueron porque los niños no podían acostumbrarse a no tener electricidad ni agua.”

“Estoy buscando trabajo y estoy analizando otras opciones que tengo, como comenzar mi propio negocio… pero tengo que hacer algo.”

“Será bueno. Será lento, pero será bueno.”

“Tengo fe en que mejorará. Que la tormenta tomó algunas cosas, pero no quitó nuestros corazones de guerreros.”

“Me gustaría que los puertorriqueños en el exterior y los estadounidenses sepan que aquí hay personas valientes, fuertes y que no se dan por vencidos, porque somos luchadores.”

“También creo que no es como si estuviéramos aquí sentados esperando ayuda para movernos. Porque nos estamos moviendo. Pero llega un límite en el que te quedas atascado porque no tienes más recursos.”

“Nosotros mismos. Puerto Rico ayudando a Puerto Rico.”

CONCLUSIÓN

Estos hallazgos muestran que el huracán María fue un evento aterrador y traumático para muchos puertorriqueños. Muchos sufrieron daños significativos en sus hogares y propiedades, algunos lo perdieron todo y muchos luchan contra los efectos mentales y emocionales de la tormenta y sus pérdidas. Dos meses después de la tormenta, las personas seguían enfrentando desafíos para satisfacer las necesidades básicas, y la vida cotidiana seguía siendo extremadamente difícil debido a la falta de electricidad y las limitadas opciones de trabajo. Las personas sienten que los esfuerzos de recuperación han sido lentos e insuficientes y han enfatizado que la isla aún necesita ayuda y recursos sustanciales para recuperarse. A pesar de estos desafíos, muchos creen que Puerto Rico se recuperará, aunque reconocen que la recuperación demorará muchos años y creen que las mismas personas tienen un papel importante que desempeñar en la recuperación.

Los autores extienden su profundo agradecimiento a las personas que compartieron su tiempo e historias, así como a las personas que ayudaron a hacer posible este proyecto, incluyendo Perry Undem Research/Communication y Marisol Lugo Juan con Lighthouse Market Intelligence.

Apéndice

Apéndice 1: Métodos

Los grupos de discusión y las entrevistas se realizaron en español e inglés en San Juan y Ponce, Puerto Rico, los días 18 y 19 de noviembre de 2017. La Kaiser Family Foundation trabajó con Perry Undem Research/Communication para conducir los grupos focales y las entrevistas. Este resumen destaca las experiencias de los participantes durante e inmediatamente después de la tormenta, y cómo les está yendo dos meses después de la tormenta. También proporciona una visión general de sus pensamientos sobre los esfuerzos de recuperación y sus reflexiones sobre el futuro para ellos y para la isla.

Figure 1: Regiones de los Grupos de Discusión y Participantes de Entrevistas

Per Enrollee Spending Growth Has Slowed Recently for All Major Payers

Published: Dec 21, 2017

Source

Peterson-Kaiser Health System Tracker Chart Collection, “How has U.S. spending on healthcare changed over time?

News Release

New KFF Resource Tracks Developments in States’ Section 1115 Medicaid Waivers

Published: Dec 20, 2017

A new resource from the Kaiser Family Foundation enables users to keep abreast of Section 1115 Medicaid waivers that are pending or have been approved by the Centers for Medicare and Medicaid Services. KFF’s Medicaid waiver tracker includes interactive maps that allow users to view states’ approved and pending waivers according to category, including Medicaid expansion; work requirements; benefit restrictions, copays and healthy behaviors; enrollment and eligibility restrictions; managed long-term services and supports; and more.

The new resource can help track developments and key themes in Medicaid waivers at a time when the Trump administration has said that it is open to states’ using waiver authority for purposes not approved by previous administrations, including work requirements, drug screening and testing, eligibility time limits, and premiums with disenrollment for non-payment for traditional Medicaid populations. Some of the requests are part of ACA expansion waivers, while others would apply to traditional populations. Links to related KFF Medicaid waiver resources are available on the tracker web page, as are downloadable tables with additional detail on each approved and pending waiver.

Navigating Recovery: Health Care Financing and Delivery Systems in Puerto Rico and US Virgin Islands

Authors: Robin Rudowitz and Julia Foutz
Published: Dec 20, 2017

Issue Brief

Hurricane Maria hit on September 20th, less than two weeks after Hurricane Irma hit on September 6, 2017, causing significant physical damage to the infrastructure (including health care infrastructure) in Puerto Rico and the US Virgin Islands (USVI).  These hurricanes left major challenges for residents and severe economic damage and health consequences in their wakes.  The problems wrought by the storms exacerbate pre-existing fiscal and health challenges faced by these territories. One of the major financing issues for the territories is how to respond given the cap on federal Medicaid financing coupled with the end of the additional funding provided through the Affordable Care Act (ACA).  This brief identifies key issues and short and long-term options for recovery in Puerto Rico and USVI drawn from research and from a November 30th roundtable discussion held at the Kaiser Family Foundation in Washington, DC with individuals representing a variety of perspectives on Medicaid policy, health insurance and care delivery systems, and disaster recovery.  The roundtable discussion was focused on Medicaid’s role in Puerto Rico and USVI and as part of the hurricane recovery efforts.

Key challenges in Puerto Rico and USVI Pre-Hurricanes

The Territory Clause of the U.S. Constitution authorizes Congress to treat territories differently than states under federal laws and programs as long as there is a “rational basis” for the differential treatment. Federal law provides that residents of the territories are generally not required to pay federal tax; however, the territories have special rules regarding Medicaid, Medicare and SSI.1 

Fiscal Challenges

Prior to the hurricanes, Puerto Rico and USVI had fiscal challenges.  In Puerto Rico, 44% of the population has incomes below poverty and the unemployment rate is 14% (compared to 14% below poverty and 5% unemployment in the US).  (Appendix Table 1).  In response to the economic crisis in Puerto Rico, Congress passed the Puerto Rico Oversight, Management and Economic Stability Act (PROMESA) in June 2016 to allow Puerto Rico to restructure its debts.  PROMESA created the Financial Oversight and Management Board (FOMB) that was required to approve a fiscal plan developed by the governor.  Prior to the hurricane there was tension between the governor and the FOMB about the severity and implementation of austerity measures.2 ,3   Prior to the hurricanes, Congress approved $296 million in additional Medicaid funding for Puerto Rico as part of the Consolidated Appropriation Act of 2017.  Before the hurricanes, there was an out flow of working people from Puerto Rico.  Population peaked in 2004 at 3.8 million and has decreased annually since then (by 9.2% through 2015).4  In USVI, 22% of the population lives in poverty and the unemployment rate is 13%. Prior to the hurricanes, the local treasury had barely enough cash to keep the government funded for three days and debt had grown so large that Wall Street stopped lending it money.5 

Health Challenges

Higher shares of the population in Puerto Rico have fair / poor health or other health conditions compared to other territories and the rest of the United States.  Roughly one third of adults report fair or poor health in Puerto Rico (34%) a much higher share compared to the 50 states and DC (18%) and USVI (20%).  The population in Puerto Rico has a higher share of heart attack/heart disease, diabetes, depression, disability, low-birthweight infants and a higher infant mortality rate than the US overall (or the USVI).  (Appendix Table 1).  The HIV death rate in Puerto Rico was nearly four times higher than that of the U.S. overall, and the number of people living with HIV in Puerto Rico in 2014 was estimated at 17,072, one of the highest rates of people living with HIV per 100,000 in the U.S.6   Puerto Rico has also seen outbreaks of mosquito-borne viral diseases over the last several years, including dengue, chikungunya, and Zika. The majority (84%) of all U.S. Zika cases were reported in Puerto Rico.7  Officials declared that the Zika epidemic was over in May 2017 due to declining cases, but with the new conditions, potential for further disease outbreaks exist.  Compared to Puerto Rico, fewer adults report fair or poor health, depression and heart attack/ disease in USVI; however, the share of uninsured (30%) in USVI is much higher than in Puerto Rico (7%) and the rest of the United States (12%).

Infrastructure and Workforce Challenges

Prior to the hurricane, Puerto Rico suffered from poor health infrastructure, declining health care workforce and health indicators that lagged behind those in the rest of the United States.  In 2015 alone, approximately 500 physicians left leaving the island with less than half the emergency physicians as well as other key specialists compared to the availability of these providers on the rest of the U.S.8  As a result, there are long wait times to access care and individuals are less likely to receive preventive care and screenings.  The Health Resources and Services Administration (HRSA) has deemed 72 of Puerto Rico’s 78 municipalities as medically underserved areas.9  Prior to the hurricanes, USVI had two main hospitals—one on St. Croix and the other on St. Thomas built in the 1980s—and affiliated healthcare facilities.  Patients with needs that cannot be served are transferred to Puerto Rico, or mainland US (Florida, New York, Atlanta and Washington DC primarily).  The Department of Health (DOH) provides services on all three islands including Maternal and Child Health and Special Needs Programs, dental services, HIV/AIDS programs, long and short-term mental health and substance abuse services with funding from CDC and HRSA.  Federally qualified health center (FQHC) on St. Thomas and on St. Croix, each provide a large volume of primary care, dental services, and obstetrical care.10  Because USVI consists of three islands, St. Croix, St. Thomas, and St. John) it is difficult to share health care resources and services need to be available on each island.

Health Financing and Medicaid Challenges

Unlike the 50 states and D.C., annual federal funding for Medicaid in the territories is subject to a statutory cap. Once federal funds are exhausted under each territory’s cap, the territory no longer receives federal financial support for its Medicaid program during that fiscal year.  The territories receive a match rate that is fixed in statute, unlike the states where the statutory formula is adjusted annually based on a states’ relative per capita income. The ACA increased the traditional match rate from 50% to 55% for the territories (plus 2.2 percentage points for 2014 and 2015).11  The ACA also provided the territories with the expansion state match rate for non-disabled adults without children (87% in 2017).12   As territories, Puerto Rico and USVI do not receive Disproportionate Share Hospital (DSH) payments that are used in other states to provide supplemental payments to hospitals that service a high share of Medicaid and uninsured patients.

Additional funds totaling $7.3 billion were made available to be divided across all the territories under the ACA. The $7.3 billion consists of a $6.3 billion allotment available between July 2011 and September 2019 and another $1 million for funds in lieu of creating its own Marketplace.13  Of the total $7.3 billion, $6.3 billion was directed to Puerto Rico and about $300 million was directed to the USVI14 .  In Puerto Rico, ACA funding was the largest source of Medicaid spending (beyond the Medicaid allotment ceiling and spending by Puerto Rico).  Based on projections from May 2017 (prior to the hurricanes), Puerto Rico expected to exhaust ACA funding in FY 2018 leaving a $877 million gap in funding (Figure 1).15  So, even before the hurricane, Medicaid financing was in peril.  Prior to the hurricanes, estimates showed that as the current rate of spending, it was unlikely that USVI would exhaust ACA related funds before their expiration in September and December 2019.16 

Figure 1: Projected Medicaid Spending in Puerto Rico (millions), FY 2017-2018

Funding for Medicare is limited in the territories, and individuals in the territories are not eligible for SSI benefits.  Under federal law, individuals are not automatically enrolled in Medicare Part B.  As a result, many fail to enroll, and are subject to a late-enrollment penalty. There are no Medicare Savings Programs (MSP) in the territories that help low-income individuals with some of the out-of-pocket costs for Medicare, so many cannot afford Medicare Part B.  Cost-sharing assistance for Medicare enrollees in the territories is limited to individuals dually eligible for full Medicaid and Medicare benefits (not to partial duals in Medicare Savings Programs).  In Puerto Rico, nearly all dual eligible are enrolled in Medicare Platino, a Medicare Advantage special needs plan that covers Medicare Part A and B services as well as outpatient prescription drugs. Residents of the territories are not eligible for the low-income subsidies (LIS) to help pay for Medicare Part D (prescription drugs).  Instead, federal law provides a fixed amount of funding to each territory to provide Medicaid coverage of prescription drugs for low-income Medicare beneficiaries, provided under Section 1935(e) of the Social Security Act, and called the enhanced allotment program (EAP). Annual EAP funding is estimated to be significantly less than funding that would be received under the LIS.17 

In addition, individuals in the territories are not eligible for Supplemental Security Income (SSI) benefits, but receive some aid through a grant (Aid to the Aged, Blind and Disabled, or AABD) program that requires matching funds from Puerto Rico.  According to GAO, an estimated 300,000 to 350,000 individuals would receive benefits (compared to 34,000-38,000 under AABD), and the average monthly benefit would be around $540 (compared to $74-$77 under AABD); SSI payments to beneficiaries are estimated to be between $1.5 billion and $1.8 billion per year in federal funding with no local matching fund requirement (compared to the current $24-$26 million under AABD).18 

What was the impact of the hurricanes in Puerto Rico & USVI?

Hurricanes Maria and Irma significantly damaged key transportation, communication, and electricity infrastructure in Puerto Rico and USVI that have exacerbated fiscal and health challenges that predated the storms. More than two months after the hurricanes, power, water, and cell service are not available to many in Puerto Rico and USVI.  The ongoing power outage in Puerto Rico has been named the “largest blackout in American history”.19   Official estimates show that 64 people died as a result of the hurricane in Puerto Rico, but more recent analysis points to more than 1,000 hurricane related deaths 42 days after the storms.20  The public health challenges are immense in Puerto Rico, as well as USVI, including the potential for the spread of infectious diseases due to unsafe living conditions, difficulties accessing health care services and needed medications, increasing mortality from unaddressed health care needs, and widespread mental health issues.  The hurricanes exacerbated the pre-hurricane trends in out migration of working age people and physicians.  In testimony to Congress on November 14, 2017, the Governors of Puerto Rico and USVI estimated hurricane damages of up to $95 billion in Puerto Rico and $7.5 billion in USVI.21 

Health care infrastructure was badly damaged by the hurricanes.  In Puerto Rico, hospitals and other health care infrastructure suffered extensive damage from the storm. In the immediate aftermath of the hurricane Maria, most hospitals were left without electricity and with limited access to generators and the fuel needed to run them. More than two months after the storm, 4 in 10 hospitals and many dialysis centers are still running on generators rather than regular electric power. However, some at the roundtable noted that generators need maintenance and diesel and were not designed to be long-term power substitutes.  Given the high burden of diabetes in Puerto Rico, dialysis centers are an important part of the health care system. Community health centers (CHCs) have also been affected by the storm. While nearly all of the 93 health center sites on the island were open as of November 17, almost half (47%) are operating with generators or still do not have power. As a result, some have been forced to limit hours of operation and services. For USVI, Governor Kenneth Mapp testified on November 14, 2017 that Hurricanes Irma and Maria completely devastated critical health care infrastructure, destroying two main hospitals and affiliated healthcare facilities leaving many residents without access to critical care and requiring dialysis patients to be flown to the states for care.22 

The hurricanes puts further stress on Medicaid funding limits and has quickened the pace to exhaust available ACA funding.  As noted above, before the hurricanes hit, Puerto Rico estimated that the ACA funding would be exhausted in FY 2018 leaving cliffs in federal funding when a greater response is needed.  USVI reported that the hurricanes have resulted in an increase in demand for Medicaid as well as for reimbursement from states providing services to displaced Virgin Islands residents.23  The economic damage from the hurricanes has also made it difficult for Puerto Rico and USVI to meet the state matching requirements to draw down federal Medicaid dollars.

As policy makers debate legislation and implement strategies to address the short and long-term recovery needs in Puerto Rico and USVI, most of the public (63 percent) say they are closely following news about the recovery effort. An increasing share say that people in Puerto Rico are not yet getting needed help (70 percent up from 62 percent last month) although these views vary considerably by party.  On this point, most Republicans (63 percent) feel the federal government is doing enough, while majorities of independents (59 percent) and Democrats (86 percent) feel it is not.  In addition, the response to the crisis varies across Puerto Rico with more assistance and progress in urban centers compared to rural areas.

What Help Has Been Provided To Date?

To date, there has been legislative action to provide funding and administrative actions through FEMA and HHS. 

Legislative Actions:  To date, two aid packages have passed to provide hurricane relief totaling just over $50 million (this funding was for aid beyond Puerto Rico and USVI).24  On November 17, 2017 the White House asked Congress for an additional $44 billion for disaster relief from recent hurricanes, but also called for spending cuts to offset disaster costs.25   Puerto Rico has also requested legislation to address the cliff in Medicaid funding when the ACA related funds are exhausted.  The bill passed by the House to reauthorize CHIP included $1 billion Medicaid funding for Puerto Rico and USVI, but has not been acted on in the Senate.

FEMA Actions:  The Federal Emergency Management Agency (FEMA) along with federal and local partners, works to help prepare and respond to disasters.  In Puerto Rico, following Hurricane Maria, FEMA has primarily been working to gain stability in five critical areas: delivering meals and water to communities in need, restoring power, maintaining a sound medical support structure, and protecting property against further damage from wind and rain.26   The US Army Corps of Engineers is posting daily progress reports measuring costs and personnel on the ground as well as statistics related to temporary roofing, emergency power, debris management, facilities assessment, and additional details about the power grid repair in Puerto Rico.27   On November 27, 2017 FEMA announced that activities in Puerto Rico will begin to transition from the response phase to recovery.  These efforts will be led by different agencies across the federal government and will focus on housing, infrastructure systems, economic recovery, health and social services, natural and cultural resources and community planning and capacity building.28 

HHS Actions:  In October, the HHS Assistant for Preparedness and Response reported that federal partners were working with the Puerto Rico Department of Health and local hospitals to “save lives, stabilize the health care infrastructure, and restore health care services.”29   Activities have included efforts to dispatch medical equipment, supplies and personnel from our National Disaster Medical System and U.S. Public Health Service; in the first 30 days, HHS, along with the Departments of Defense (DoD) and Veterans Affairs (VA) collectively cared for over 8,700 patients in Puerto Rico.30   Federal teams are working with medical volunteers from New York hospitals – under an emergency medical assistance compact that is an agreement between Departments of Health in New York and Puerto Rico.31   In both Puerto Rico and USVI the federal government has activated the Emergency Prescription Assistance Program, which pays for prescription medications for people without health insurance who are affected by disasters.

What are the Limitations of Federal Financing?

Historically, territories have exceeded their allotted Medicaid funding ceilings each year. As noted above, the ACA funding has provided additional federal support for health coverage, but even before the hurricanes Puerto Rico and other territories were anticipating gaps in health spending as these funds are exhausted or expire.  The hurricanes have increased demand for Medicaid but also made it difficult for Puerto Rico and USVI to fund their Medicaid matching share.

Financing caps may make it difficult to use Medicaid waivers to assist Puerto Rico and USVI.  In other emergencies, the Administration has been able to grant Medicaid waivers to simplify and streamline enrollment processes, expand eligibility for coverage and provide funds for uncompensated care.  Such actions were taken following Hurricanes Katrina and Rita, and in responding to the 9/11 crisis in New York and the water crisis in Flint, Michigan. Most recently, Texas received some waivers to provide a six-month extension of eligibility for those enrolled in Medicaid and CHIP in FEMA-declared disaster counties and Texas also waived co-payments for CHIP covered services from August 25 through November 30, 2017, including pharmacy, for CHIP members with a permanent address in one of the Hurricane Harvey FEMA-declared disaster counties.32  However, the block-grant financing structure of Medicaid in Puerto Rico does not allow for similar Medicaid response through waivers in Puerto Rico.  So, there are limited ways in which Medicaid can be used through administrative actions to provide short-term assistance.

Other federal funding for DSH, Medicare and SSI is also restricted in the territories.  Limited federal funds for hospital DSH payments, Medicare Part B and Part D financing and SSI benefits put further strain on the overall health care system.  Addressing these issues could provide additional health care resources beyond changes in Medicaid financing caps and match rates.

Options to Address health care needs:  Reflections from the RoundTable

Much of the November 30 roundtable discussion focused on identifying options to address short and longer-term health care needs in Puerto Rico and USVI.  However, there was a strong recognition that it would be necessary to both address pre-existing fiscal debt challenges as well as economic damages related to the storms to secure a sustainable economic future in Puerto Rico and USVI.  Building a strong health care system with adequate financing was identified as key for economic development on the islands.

  • Provide economic and fiscal stability for Puerto Rico and USVI going forward. Short-term financing to address damages related to the storms is critical.  However, this short-term funding will not address the underlying fiscal issues tied to the debt-burden that will be needed for longer-term stability.  Improving economic stability is important to efforts to stem the flow of out migration and incentivize working people to remain or return to Puerto Rico.  Although difficult, participants at the round table underscored the importance of focusing simultaneously on short-term as well as longer term financing relief.  Strategies to address economic development are key in addressing long-term financing issues.
  • Address Medicaid financing caps and matching requirements. The capped Medicaid financing structure and limit on federal matching funds contributes to broader financing problems in Puerto Rico and USVI and constrains better health care coverage and access.  In the near-term, some participants at the roundtable noted that increased Medicaid financing, without a federal matching requirement (similar to emergency relief after Katrina) could provide support to Puerto Rico and USVI, while legislation to change the cap and match rate are longer-term issues.  Overall health care funding efforts could also include support for disproportionate share payments, Medicare (Medicare Savings Programs and low-income subsidy funding) as well as funding for SSI.
  • Provide support to promote health care delivery system improvements as well as improvements to health capacity (infrastructure and workforce). In the short-term, additional funding can be used to help finance community health centers and other local providers.  Some at the roundtable supported changes in emergency response that would automatically trigger increased funding for clinics in disasters.  More broadly, access to care and public health measures are lagging in both Puerto Rico and USVI.  Changes to financing can help increase resources, but other changes such as a targeted focus on capacity (in terms of infrastructure and health care work force) are interconnected; it is difficult to attract providers without facilities to support their practice.  Consideration of new models of care that may rely on electronic health records or tele-health may offer promise to improve health care systems and outcomes is important in plans to build capacity.
  • Engage philanthropy and non-profits to work in conjunction with the federal and territory governments to make progress. Those experienced in disaster recovery noted the importance of a local foundation that can bring together governments, private sector, local communities and non-profits to help direct and organize relief and recovery efforts and to marshal funds from many sources.  There may be a lot of paperwork to access federal funds.  Ultimately, local leader should be working side-by-side with federal and other entities to help direct relief and recovery efforts.

Conclusion

The recent hurricanes brought light to the pre-existing economic and health issues in Puerto Rico and USVI.  Fiscal and health challenges have been exacerbated over the years by differential treatment across many federal programs; however, the capped financing and limited federal match rate for Medicaid stand out as key contributors to both the fiscal crisis and a struggling health care system.  The hurricanes resulted in widespread damage to the infrastructure (including health care infrastructure) as well as severe economic damage, health consequences and many deaths.  Research and input from a roundtable discussion point to a number of options to address the short and longer-term needs of residents in Puerto Rico in USVI.  Such options include: funding and support to provide economic and fiscal stability; options to address the Medicaid funding disparities (as well as Medicare and SSI); initiatives to support health capacity through infrastructure and workforce development efforts, and new opportunities to engage philanthropy and non-profits to work with the federal and territory governments to make progress toward recovery and stability.

Appendix

Appendix Table 1: Selected Indicators on the U.S. Territories, Compared to the 50 States and DC
50 States and DCPuerto RicoU.S. Virgin Islands
Total Population33 326,625,7913,351,827107,268
Demographic and Economic Characteristics
Citizenship34 

U.S. Born

86%97%67%

Naturalized

7%1%21%

Not a Citizen

7%1%12%
Age35 

0-14

19%16%20%

15-24

13%14%11%

25-54

39%38%37%

55-64

13%13%14%

65+

16%19%18%
Race/Ethnicity36 

White

61%1%14%

Black

12%<1%66%

Hispanic

18%99%17%

Asian/Pacific Islander

6%<1%<1%

Mixed Race/Other

3%<1%3%
Unemployment Rate37 5%14%13%
Below Poverty Level38 14%44%22%
Health Access Indicators39 
Adult Uninsured Rate12%7%30%
Needed to see a doctor but could not because of cost in the past 12 months87%87%78%
Routine Check-Up in the past 12 months71%82%69%
Dental Visit in the past 12 months66%69%51%
Health Status Indicators40 
Birth Rate (per 1,000 population)13%8%13%
Life Expectancy at Birth (Age in years)807980
Adults Reporting Fair/Poor Health18%34%20%
Adults Reporting Overweight/Obese65%67%65%
Adults Reporting Heart Attack/Heart Disease7%11%4%
Adults Reporting Diabetes11%15%13%
Adults Reporting Cancer11%6%5%
Adults Reporting Depression17%18%6%
NOTES: Totals may not sum to 100% due to rounding. People of Hispanic origin may be of any race but are categorized as Hispanic for this analysis; all other racial groups are non-Hispanic. SOURCES: See endnotes.

Endnotes

  1. Congressional Task Force on Economic Growth in Puerto Rico, Report to the House and Senate, December 20, 2016, https://www.finance.senate.gov/imo/media/doc/Bipartisan%20Congressional%20Task%20Force%20on%20 Economic%20Growth%20in%20Puerto%20Rico%20Releases%20Final%20Report.pdf. ↩︎
  2. Peter Shin, Jessica Sharac, Marie Nina Luis, and Sara Rosenbaum, Puerto Rico’s Community Health Centers in a Time of Crisis, (Washington, DC: The George Washington University, Milken Institute School of Public Health, Department of Health Policy and Management, December 2015), https://publichealth.gwu.edu/sites/default/files/downloads/GGRCHN/Policy%20Research%20Brief%2043.pdf. ↩︎
  3. Richard V. Reeves and Katherine Guyot, Keeping our PROMESA: What the U.S. can do about Puerto Rico’s Fiscal Crisis, (Washington, DC: The Brookings Institution, September 2017), https://www.brookings.edu/research/keeping-our-promesa-what-the-u-s-can-do-about-puerto-ricos-fiscal-crisis/. ↩︎
  4. Congressional Task Force on Economic Growth in Puerto Rico, Report to the House and Senate, December 20, 2016, https://www.finance.senate.gov/imo/media/doc/Bipartisan%20Congressional%20Task%20Force%20on%20 Economic%20Growth%20in%20Puerto%20Rico%20Releases%20Final%20Report.pdf. ↩︎
  5. Jeremy W. Peters, “In the Virgin Islands, Hurricane Maria Drowned What Irma Didn’t Destroy,” New York Times (September 27, 2017), https://www.nytimes.com/2017/09/27/us/hurricane-maria-virgin-islands.html. ↩︎
  6. Josh Michaud and Jennifer Kates, Public Health in Puerto Rico after Hurricane Maria, (Washington, DC: Kaiser Family Foundation, November 2017), https://modern.kff.org/other/issue-brief/public-health-in-puerto-rico-after-hurricane-maria/. ↩︎
  7. Ibid. ↩︎
  8. “Evidence Indicates a Range of Challenges for Puerto Rico Health Care System,” U.S. Department of Health and Human Services (HHS), Office of the Assistant Secretary for Planning and Evaluation (ASPE), January 2017, https://gonzalez-colon.house.gov/sites/gonzalezcolon.house.gov/files/wysiwyg_uploaded/Puerto%20Rico%20Assessment–Embargoed.pdf. ↩︎
  9. Ibid. ↩︎
  10. “Virgin Islands Health Information Exchange Strategic & Operational Plan”, Response to Health Information Technology State Grant Program, January 15, 2011.  https://www.healthit.gov/sites/default/files/usvi-hie-sop_12-15-11.pdf ↩︎
  11. “Puerto Rico Medicaid and CHIP Program Information,” Centers for Medicare and Medicaid Services (CMS), accessed November 21, 2017, https://www.medicaid.gov/medicaid/by-state/puerto-rico.html. ↩︎
  12. “Medicaid and CHIP in Puerto Rico,” Medicaid and CHIP Payment and Access Commission (MACPAC), October 2017,   https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-puerto-rico/. ↩︎
  13. The additional Marketplace funds are also available through FY 2019 and can only be accessed after the first source of ACA funding has been depleted. ↩︎
  14. “Medicaid Financing and Spending in Puerto Rico,” Medicaid and CHIP Payment and Access Commission (MACPAC), August 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-financing-and-spending-in-puerto-rico/ and “Medicaid Financing and Spending in the US Virgin Islands,” Medicaid and CHIP Payment and Access Commission (MACPAC), August 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-the-u-s-virgin-islands/. ↩︎
  15. “Medicaid Financing and Spending in Puerto Rico,” Medicaid and CHIP Payment and Access Commission (MACPAC), August 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-financing-and-spending-in-puerto-rico/. ↩︎
  16. Medicaid Financing and Spending in the US Virgin Islands,” Medicaid and CHIP Payment and Access Commission (MACPAC), August 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-the-u-s-virgin-islands/. ↩︎
  17. Congressional Task Force on Economic Growth in Puerto Rico, Report to the House and Senate, December 20, 2016, https://www.finance.senate.gov/imo/media/doc/Bipartisan%20Congressional%20Task%20Force%20on%20 Economic%20Growth%20in%20Puerto%20Rico%20Releases%20Final%20Report.pdf. ↩︎
  18. Congressional Task Force on Economic Growth in Puerto Rico, Report to the House and Senate, December 20, 2016, https://www.finance.senate.gov/imo/media/doc/Bipartisan%20Congressional%20Task%20Force%20on%20 Economic%20Growth%20in%20Puerto%20Rico%20Releases%20Final%20Report.pdf. ↩︎
  19. Trevor Houser and Peter Marsters, America’s Biggest Blackout, (New York, NY: Rhodium Group, October 2017), http://rhg.com/notes/americas-biggest-blackout. ↩︎
  20. Frances Robles, Kenan Davis, Sheri Fink, and Sara Almukhtar, “Official Toll in Puerto Rico: 64. Actual Deaths May Be 1,052,” New York Times (December 9, 2017), https://www.nytimes.com/interactive/2017/12/08/us/puerto-rico-hurricane-maria-death-toll.html?_r=0. ↩︎
  21. United States Senate, Committee on Energy and National Resources Hearing, Hurricane Recovery Efforts in Puerto Rico and the U.S. Virgin Islands, November 14, 2017, statement of Hon. Ricardo Rosselló, Governor of Puerto Rico, https://www.energy.senate.gov/public/index.cfm/files/serve?File_id=EFF569D6-FA29-414D-9538-E4B9D02D6F43; United States Senate, Committee on Energy and National Resources Hearing, Hurricane Recovery Efforts in Puerto Rico and the U.S. Virgin Islands, November 14, 2017, statement of Kenneth E. Mapp, Governor of U.S. Virgin Islands, https://www.energy.senate.gov/public/index.cfm/files/serve?File_id=A2538A49-2953-4BA1-8C94-0807E62050A5. ↩︎
  22. United States Senate, Committee on Energy and National Resources Hearing, Hurricane Recovery Efforts in Puerto Rico and the U.S. Virgin Islands, November 14, 2017, statement of Kenneth E. Mapp, Governor of U.S. Virgin Islands, https://www.energy.senate.gov/public/index.cfm/files/serve?File_id=A2538A49-2953-4BA1-8C94-0807E62050A5. ↩︎
  23. Ibid. ↩︎
  24. H.R. 569/H.R. 2266: Congress passes $36.5 billion aid package on 10/24/17. Signed by President on 10/26/17. (https://www.congress.gov/bill/115th-congress/house-bill/2266/actions) and H.R. 601: Congress passes $15 billion in hurricane relief on 9/8/2017. Signed by President on 9/8/2017. (https://www.congress.gov/bill/115th-congress/house-bill/601/actions). ↩︎
  25. Thomas Kaplan, “White House Requests More Disaster Aid but Also Seeks Cuts as Deficits Rise,” New York Times (November 17, 2017), https://www.nytimes.com/2017/11/17/us/politics/trump-disaster-relief-hurricanes-wildfire-tax-cuts.html?_r=0. ↩︎
  26. “Hurricane Maria Update,” Federal Emergency Management Agency (FEMA), October 19, 2017, https://www.fema.gov/news-release/2017/10/19/4339/hurricane-maria-update. ↩︎
  27. “Hurricane Irma and Maria Response,” U.S. Army Corps of Engineers, November 15, 2017, http://www.usace.army.mil/Hurricane-Irma/Daily-Progress-Graphic/. ↩︎
  28. “Puerto Rico Begins the Transition from Response to Recovery,” Federal Emergency Management Agency (FEMA), November 27, 2017, https://www.fema.gov/news-release/2017/11/27/4339/puerto-rico-begins-transition-response-recovery. ↩︎
  29. Robert Kadlec, “Providing Care and Restoring Health Services in Puerto Rico,” U.S. Department of Health and Human Services (HHS), Office of the Assistant Secretary for Preparedness and Response (ASPR) Blog, October 19, 2017, https://www.phe.gov/ASPRBlog/pages/BlogArticlePage.aspx?PostID=286. ↩︎
  30. Ibid. ↩︎
  31. Robert Kadlec, “Providing Care and Restoring Health Services in Puerto Rico,” U.S. Department of Health and Human Services (HHS), Office of the Assistant Secretary for Preparedness and Response (ASPR) Blog, October 19, 2017, https://www.phe.gov/ASPRBlog/pages/BlogArticlePage.aspx?PostID=286; “HHS Activates Aid for Uninsured U.S. Islands Residents Needing Medicine,” U.S. Department of Health and Human Services (HHS), November 2, 2017, https://www.hhs.gov/about/news/2017/11/02/hhs-activates-aid-uninsured-us-virgin-islands-residents-needing-medicine.html. ↩︎
  32. “Hurricane Harvey Medicaid and Children’s Health Insurance Program (CHIP) Frequently Asked Questions,” Texas Health and Human Services Commission, November 22, 2017, https://apps.hhs.texas.gov/documents/hurricane-harvey-faq.pdf. ↩︎
  33. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  34. 50 States and DC and Puerto Rico Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table S0501; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. U.S. Virgin Islands Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-2; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  35. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  36. 50 States and DC and Puerto Rico Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table B03002; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. U.S. Virgin Island Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-1; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  37. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  38. 50 States and DC and Puerto Rico Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table DP03; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. U.S. Virgin Island Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-3; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  39. Reported for adults 18 and older. Kaiser Family Foundation analysis of the 2016 Behavioral Risk Factor Surveillance System. ↩︎
  40. Birth Rate and Life Expectancy Estimates: The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. Other Health Status Estimates: Reported for adults 18 and older. Kaiser Family Foundation analysis of the 2016 Behavioral Risk Factor Surveillance System. ↩︎

U.S. Virgin Islands: Fast Facts

Published: Dec 13, 2017
Selected Pre-Hurricane Indicators on the U.S. Virgin Islands, Compared to the 50 States and DC
U.S. Virgin Islands50 States and DC
Total Population (2017)1 107,268326,625,791
Demographic and Economic Characteristics
U.S. Citizens2 88%93%
Over age 653 18%16%
Below Poverty Level4 22%14%
Unemployment Rate5 13%5%
Median Household Income6 $37,254$57,617
Health Access Indicators
Share Enrolled in Medicaid/CHIP7 22%24%
Adult Uninsured Rate8 30%12%
Needed to see a doctor but could not because of cost in the past 12 months9 78%87%
Routine Check-Up in the past 12 months10 69%71%
Dental Visit in the past 12 months11 51%66%
Health Status Indicators12 
Adults Reporting Fair/Poor Health20%18%
Adults Reporting Diabetes13%11%
Adults Reporting Heart Attack/Heart Disease4%7%
Adults Reporting Cancer5%11%
Adults Reporting Depression6%17%
Infant Mortality Rate per 1,000 Live Births7.95.8
Federal Medicaid Rules13 
Federal Matching RateFixed at 55%Ranges from 50-83% based on state’s per capita income
Federal FundingCapped at $16.8 million in FY16Uncapped
  • With nearly 110,000 residents, the U.S. Virgin Islands, a U.S. territory, is located in the Caribbean and consists of the islands St. Croix, St. Thomas, and St. John. Virgin Islanders are natural-born U.S. citizens.
  • Although Medicaid and CHIP enrollment rates are similar, adults living in the U.S. Virgin Islands are two and a half times more likely to be uninsured than adults living in the 50 states and DC.14 
  • Unlike the 50 states and DC, annual federal Medicaid funding for the U.S. Virgin Islands is capped, meaning once federal funds are exhausted, the island no longer receives federal Medicaid funds during that fiscal year.15  The territory also does not receive payments for uncompensated care (DSH).16 
  • On September 6, 2017 Hurricane Irma hit the U.S. Virgin Islands followed by Hurricane Maria less than two weeks later, leaving severe damage to the infrastructure and limiting access to electricity, water, and basic necessities.17  Both hospitals on St. Thomas and St. Croix and the clinic on St. John were destroyed and will have to be rebuilt. In the meantime, dialysis patients and patients with critical medical needs have been airlifted to several mainland states.18 
  • Two months after the Hurricanes made landfall, over two thirds of residents remained without power.19 
  • The Hurricanes have placed additional pressure on an already strained economy, which relies heavily on tourism. Many hotels in the territory are closed for the 2017-2018 season, resulting in staff layoffs.20 ,21 
  1. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  2. U.S. Virgin Islands Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-2; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. 50 States and DC Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table S0501; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  3. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  4. U.S. Virgin Island Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-3; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. 50 States and DC Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table DP03; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  5. The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. ↩︎
  6. U.S. Virgin Island Estimates: U.S. Census Bureau; 2010 Census of the Island Areas, Table DP-3; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. 50 States and DC Estimates: U.S. Census Bureau; 2016 American Community Survey 1-Year Estimates, Table DP03; using American FactFinder, http://factfinder.census.gov. ↩︎
  7. U.S. Virgin Islands Estimates: “Medicaid and CHIP in the U.S. Virgin Islands,” MACPAC, October 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-the-u-s-virgin-islands/. 50 States and DC Estimates: “MACStats: Medicaid and CHIP Data Book,” MACPAC, December 2017, https://www.macpac.gov/wp-content/uploads/2017/12/MACStats-Medicaid-and-CHIP-Data-Book_December-2017.pdf. ↩︎
  8. Reported for adults 18 and older. Kaiser Family Foundation analysis of the 2016 Behavioral Risk Factor Surveillance System. ↩︎
  9. Ibid. ↩︎
  10. Ibid. ↩︎
  11. Ibid. ↩︎
  12. Infant Mortality Estimates: The World Factbook, 2017. Washington, DC: Central Intelligence Agency, Accessed November 2017, https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html. Other Health Status Estimates: Reported for adults 18 and older. Kaiser Family Foundation analysis of the 2016 Behavioral Risk Factor Surveillance System. ↩︎
  13. “Medicaid and CHIP in the U.S. Virgin Islands,” MACPAC, October 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-the-u-s-virgin-islands/. ↩︎
  14. Reported for adults 18 and older. Kaiser Family Foundation analysis of the 2016 Behavioral Risk Factor Surveillance System. ↩︎
  15. The ACA provided the U.S. territories with an additional $7.3 billion in Medicaid funding. The U.S. Virgin Islands received $273.8 million available between July 2011 and September 2019 under Section 2005 and $24.9 million available between July 2011 and December 2019 under Section 1323. “Medicaid and CHIP in the U.S. Virgin Islands,” MACPAC, October 2017, https://www.macpac.gov/publication/medicaid-and-chip-in-the-u-s-virgin-islands/. ↩︎
  16. U.S. territories do not receive Disproportionate Share Hospital (DSH) payments that are used in the 50 states and DC to provide supplemental payments to hospitals that service a high share of Medicaid and uninsured patients. ↩︎
  17. United States Senate, Committee on Energy and National Resources Hearing, Hurricane Recovery Efforts in Puerto Rico and the U.S. Virgin Islands, November 14, 2017, statement of Kenneth E. Mapp, Governor of U.S. Virgin Islands, https://www.energy.senate.gov/public/index.cfm/files/serve?File_id=A2538A49-2953-4BA1-8C94-0807E62050A5. ↩︎
  18. Jeremy W. Peters, “In the Virgin Islands, Hurricane Maria Drowned What Irma Didn’t Destroy,” New York Times (September 27, 2017), https://www.nytimes.com/2017/09/27/us/hurricane-maria-virgin-islands.html. ↩︎
  19. Samantha Raphelson, “2 Months After Maria and Irma, U.S. Virgin Islands Remain In The Dark,” NPR (November 14, 2017), https://www.npr.org/2017/11/14/564138720/2-months-after-maria-and-irma-u-s-virgin-islands-remain-in-the-dark. ↩︎
  20. “Hotel Property Updates,” VInow, November 27, 2017, http://www.vinow.com/recovery/hotel-property-updates/. ↩︎
  21. Richard Pérez-Peña, “After Irma and Maria: How 3 Spots on the U.S. Virgin Islands Are Faring,” New York Times (November 10, 2017), https://www.nytimes.com/2017/11/10/us/virgin-islands-hurricanes.html. ↩︎
News Release

In Focus: Immigrant Families, Including Immigrants Lawfully in the U.S. and Those Who Are Undocumented, Report Rising Fear and Anxiety Affecting Their Daily Lives and Health

Published: Dec 13, 2017

With the Trump administration pursuing new restrictions on immigration and increased immigration enforcement, the political and social climate for immigrant families has changed substantially over the last year. A new Kaiser Family Foundation report based on focus groups with immigrant families and interviews with pediatricians finds that immigrants from a variety of backgrounds report rising fear and anxiety that is affecting their daily lives and routines as well as the health of their children, who are predominantly U.S.-born citizens.

The new report, Living in an Immigrant Family in America: How Fear and Toxic Stress Are Affecting Daily Life, Well-Being, & Health, is based on focus groups conducted in 5 languages with 100 parents in immigrant families from 15 countries, as well as telephone interviews with 13 pediatricians who serve immigrant communities. Focus groups were conducted in eight cities and four states: Chicago, Illinois, Boston, Massachusetts; and Anaheim, Fresno, Los Angeles, Oakland and San Diego, California.

Among the key takeaways from the focus groups:

  • Parents and children in families with an undocumented family member fear being separated from each other. Those with lawful status worry about the stability of their status and whether they may lose permission to remain in the U.S. These fears escalated after the rescission of the federal Deferred Action for Childhood Arrivals (DACA) program, which protected undocumented immigrants brought to the country as children.
  • Parents and pediatricians said that racism and discrimination, including bullying of children have increased.
  • Some immigrant families say they are afraid to leave their home, limit their participation in activities, and face increased employment challenges.
  • Parents and pediatricians also report negative effects on the health and well-being of children, including problems sleeping, headaches and stomachaches and mental health issues such as depression and anxiety, all of which could point to long-term health consequences for children.

A panel of experts discussed the report today at a public briefing held by KFF at its Washington, D.C. offices. An archived webcast of the briefing, as well as copies of presentation slides and other materials, will be available on kff.org later today.